■ El bandoneonista se presentará el viernes con la OMT en el Lunario del Auditorio
La sangre mexicana, parte de la llamada renovación del tango, dice César Olguín
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Una de las participantes del primer Festival de Tango en La Habana
Foto: Ap
“En México hay un público joven interesado en acercarse como oyente y, en menor medida, como partícipe del baile o la música y el canto del tango. Aquí, afortunadamente hay pequeños ensambles, dúos, tríos, cuartetos o quintetos que han desarrollado una intensa actividad. Por otra parte, en este país son pocos los argentinos que desarrollan ese género”, expresó en entrevista con La Jornada César Olguín, bandoneonista que se presentará el viernes 4 de julio en el Lunario del Auditorio Nacional.
Estará al frente de la Orquesta Mexicana de Tango (OMT), integrada por los bandoneonistas Raúl Bici y Víctor Madariaga; los violinistas Humberto López, Natalia Arrollo, Citlalli Hernández y Alejandro Flores; la pianista Frania Mallorquín, y el contrabajista Mario Cortés. “Algunos han sido mis alumnos”, dijo.
Añadió que en los años 70 y 80 la cantidad de argentinos que interpretó tango en México “era muy significativa y los lugares eran muchos, pero hoy son alrededor de tres y, proporcionalmente, se han ido sumando los mexicanos. No sé si hay un resurgimiento, porque el tango siempre está en constante búsqueda o retroalimentación”.
Piezas que representan una época
Agregó: “Parte de esta renovación, si es que la hay, es con esta sangre mexicana. Hay muchos conocedores del tango y lo vinculan con la historia; hay piezas que han representado una época de un país. Si bien es cierto que está geográficamente localizado, en su origen, en lo que es el Río de la Plata, no solamente en Buenos Aires, porque esto genera conflicto con el país vecino (Uruguay). El tango surge en ambos sitios.
“Desde su nacimiento, el tango ha respondido a su alma gitana y ha andado por el mundo, al grado que los finlandeses se sienten sus dueños. Hay sectores en Finlandia que ponen en duda que sea argentino. Lo mismo sucede en Colombia y en menor medida en Cuba. Todo ha dado lugar a que gente muy preparada se haya adentrado en la historia del género”, añadió.
Falta difusión
Sí, le falta difusión “como a otras manifestaciones de nuestros países que están sumergidas en el abandono, porque no son redituables al bolsillo de los productores o del mercado. A estas alturas de mi vida… no sé si el tango es para mí o yo soy para él. Se ha apropiado de mí”.
Con una trayectoria de más de 25 años y 12 discos, algunos verdaderas joyas, como la Suite piazzollana y Solo como un perro, agregó que “hasta sano se está enfermo de tango”.
El padrino de la Orquesta Mexicana de Tango es el periodista y enciclopedia viviente de esta cultura Jacobo Zabludovsky, quien de lunes a viernes en su noticiero De 1 a 3 comenta alguna composición famosa o casi secreta. Para Olguín, “México es un país cercano a la cultura del tango. La OMT está integrada por jóvenes mexicanos, que me incluye, por lo de mexicano, no por lo de jóvenes.
“El tango ha sido una música a la que no han escapado exponentes mexicanos como Agustín Lara y María Greever o Belisario García. Arráncame la vida, de El Flaco de Oro, es una clara muestra de esa capacidad compositiva. Libertad Lamarque grabó un disco con tangos de Lara. Hay intérpretes famosos, como Los Panchos, Emilio Tuero, Alfonso Ortiz Tirado… y hasta Luis Miguel.
“No hay que olvidar al Trío Argentino, integrado por mexicanos (Medel-Pimentel-Ledezma). La OMT ha nacido como consecuencia natural del trabajo y la experiencia de estos jóvenes en la ejecución de esta música.
“Este es el proyecto que el viernes 4 de julio presentaremos en el Lunario”.
–¿Se oyen como recién bajados de un barco?
–Uno debe tener cuidado con algunas declaraciones para no presumir demasiado. Creo que la OMT suena como una agrupación típica. Confío mucho en la capacidad de estos músicos. Tenemos cinco meses juntos. Vamos a tocar Organito de la tarde, El choclo, Sentimiento gaucho; obras de Pugliese, como Recuerdo, Gallo ciego…; de Aníbal Troilo, Danzarín, Melancólico, Nocturna…”
Boletos en Ticketmaster y en taquillas del Lunario.