■ Aduce que elevará costos de operación; la medida va, dice Delgado
Solicita Canacope diferir hasta 2009 la puesta en vigor del No circula sábatino
El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope), José Caudillo Herrera, pidió a las autoridades capitalinas posponer hasta 2009 el programa Hoy no circula sabatino”, pues bajo las actuales circunstancias provocará una elevación en los costos de operación de los pequeños negocios por 390 millones de pesos y una caída de turistas con una pérdida de alrededor de 520 millones.
La secretaria de Medio Ambiente, Martha Delgado, rechazó una afectación económica y recomendó a las personas interesadas en visitar el Distrito Federal soliciten un pase turístico en las vacaciones de verano o verifiquen sus vehículos con placas de otros estados o del extranjero de manera voluntaria en cualquier época del año y, en caso de obtener “0” ó “00” exentar las restricciones a la circulación de 5 a 11 horas a partir del primero de septiembre y la medida sabatina.
Para mantener su holograma vigente deberán realizar su verificación cada seis meses cuando les corresponda, de acuerdo con el último dígito de su placa, aunque en caso de no hacerlo no serán acreedores a multas, pero tendrán que apegarse a las restricciones de circulación vigente en la Zona Metropolitana del Valle de México, explicó.
En conferencia de prensa Caudillo Herrera precisó que están a favor de medidas que promueven el desarrollo armónico de la ciudad, pero no es el momento de aplicar la medida, cuando no se han concluido las obras viales anunciadas para mejorar la circulación, ni se ha renovado la totalidad de la flota del servicio público de transporte, lo cual fomentará la adquisición de autos chatarra por quienes necesitan “puentear” la restricción vehicular.
Ello derivará en mayores índices de contaminación y congestionamientos viales que se viven todos los sábados y convertirá en un nuevo impuesto para los automovilistas pobres, quienes no tienen recursos para cambiar sus unidades por otros con holograma “0” o “00”, convirtiéndose en una medida que “acose y persiga la pobreza”, afectando la actividad comercial, pues una cuarta parte de sus ventas se realizan ese día y la mitad de los comerciantes lo dedican a surtir sus anaqueles.
Así que su implementación afectará a 108 mil comerciantes que en cuatro de cada 10 de sus vehículos tienen el holograma 2 y promoverá la corrupción de los agentes de tránsito que se han dedicado a “venadear” en las principales entradas de la ciudad, convirtiéndolas en “verdaderas casetas de peaje”, señaló.