Usted está aquí: martes 1 de julio de 2008 Capital Zayas pide que se le acuse de homicidio imprudencial

■ Empleado de una refaccionaria cercana al Divine declara en su favor: “sí pidió ayuda”

Zayas pide que se le acuse de homicidio imprudencial

Mirna Servín Vega

Por más de ocho horas, Guillermo Zayas, acusado del homicidio doloso de 12 personas durante el operativo en la discoteca News Divine, sostuvo su defensa tras la rejilla de prácticas del juzgado 19 en el Reclusorio Oriente y logró que el juez Rafael Guerra admitiera como prueba los argumentos del propio procurador Rodolfo Félix Cárdenas vertidos en un libro sobre el caso Tláhuac, con los que defendió al entonces secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, de la acusación que ahora le imputa a él.

Asimismo, se presentó a declarar a su favor Raúl Gamba, empleado de una refaccionaria ubicada cerca de la discoteca, quien aseguró que Zayas le solicitó ayuda y una barreta para abrir la puerta de emergencia y pudieran salir los jóvenes del inmueble.

El testigo ofrecido por Zayas lo reconoció como una de las personas que “estaban desesperadas por abrir una puerta”. Gamba apuntó que, ese día, Zayas usaba un collarín, característica por la que lo ubicó y reconoció en el lugar.

Otro elemento importante durante la audiencia de desahogo de pruebas fue que, por medio de su abogado, Zayas solicitó ser juzgado por homicidio imprudencial y no doloso, lo que significaría que, en caso de que fuera aceptado por el juez Guerra, el acusado podría pagar una fianza para continuar su juicio en libertad.

De acuerdo con Juan Antonio Araujo, quien ahora lleva la defensa de Zayas, la consideración del libro escrito por Félix Cárdenas podría anular la agravante del homicidio considerado doloso, ya que el procurador expuso argumentos técnicos y legales para sustentar que el dolo sólo se comete cuando no se hizo absolutamente nada para evitar la acción que se le imputa, es decir, la muerte de 12 personas.

También declararon los ex policías capitalinos Marco Antonio Cacique Rosales y Carlos Mario Zepeda Saavedra, detenidos por falsedad de declaraciones.

 
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