■ Con la presión a tope le arrebató el empate 1-1 en el último segundo de la prórroga
La sorprendente Turquía eliminó a Croacia en tiros penales
■ Los otomanos enfrentarán a Alemania por un boleto a la final de la Eurocopa
■ El portero veterano Rustu Recber atajó el último tiro de los balcánicos, quienes fallaron los dos primeros
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Rustu Recber se vistió de héroe al atajar el tiro penal del croata Mladen Petric
Foto: Reuters
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Los turcos festejan eufóricos el pase a semifinales del torneo europeo, luego de lograr nuevamente la hazaña
Foto: Ap
Viena, 20 de junio. ¡Otra vez al estilo turco! Con la presión a tope, el cronómetro agonizante y un estadio en total expectación, Turquía le arrebató el empate a Croacia en el último segundo de la prórroga, y con el 1-1 estiró la definición a la ronda de penales, en los que se impuso 3-1.
El próximo miércoles, en Basilea, los sorprendentes otomanos pelearán ante Alemania por un boleto a la final de la Eurocopa 2008.
La milagrosa noche tuvo dos héroes, el sustituto Semih Senturk, autor del agónico gol del empate, y el portero veterano Rustu Recber, quien atajó el último disparo croata desde los 11 pasos, ejecutado por Mladen Petric.
Así, Turquía volvió a pegar el grito eufórico final, como sucedió ante Suiza y República Checa.
El partido, que se disputó en el estadio Ernst Happel de la capital austriaca, ante 52 mil espectadores y con el arbitraje del italiano Roberto Rosetti, ofreció en los tres minutos finales de la prórroga toda la emoción que había escatimado previamente.
A los 129 minutos, el también sustituto Ivan Klasnic, quien juega con un riñón transplantado, anotó con la cabeza ante e el arco libre turco, tras una salida en falso de Rustu, y puso el 1-0 para Croacia.
Un Zurdazo impresionante
La historia parecía sentenciada, pero en la última jugada del cotejo Semih sacó un zurdazo impresionante al ángulo y Turquía revivió, y luego prolongó el festejo tras los penales, porque los croatas exhibieron muy mala puntería:
Luka Modric e Ivan Rakitic echaron su tiro a los costados, mientras Rustu voló para rechazar el de Petric. Por los turcos no fallaron Arda Turan, otra vez Semih y Hamit Altintop.
De haber un ganador en los 90 minutos reglamentarios, ése tendría que haber sido Croacia, que buscó más el resultado. El equipo de Slaven Bilic mueve bien y rápido el balón, pero no tiene jugadores que cambien el ritmo, y menos un talento “tipo sudamericano” que pueda desnivelar.
Los balcánicos dominaron la primera media hora y tuvieron una ocasión clara con Ivica Olic, a centro de Modric, pero en el último cuarto de hora de la primera etapa Turquía replicó con un derechazo impresionante de Mehmet Topal.
El segundo tiempo prometía, pero resultó un espejismo. Croacia recuperó el dominio, pero siguió sin inventiva; dos cabezazos de Olic, un disparo de Ivan Rakitic y una ráfaga sobre el final del tiempo reglamentario. en el que Rustuc lució con fantástica estirada al ángulo ante disparo de Darijo Srna.
En la prórroga pareció surtir efecto el “reto” que en plena cancha pegó a sus jugadores el técnico Fatih Terim. Los otomanos jugaron esa media hora con otra actitud y generaron tres ocasiones en los primeros 10 minutos.
Y la historia se repitió: sin mucho juego, pero con la fuerza del corazón, Turquía se ubicó por primera vez en las semifinales de una Eurocopa.
El timonel Terim afirmó: “Nos hemos convertido en una de las grandes naciones del futbol. Nuestro pueblo puede gozar y si está orgulloso de nosotros, nosotros también lo estamos de él”.