Reprueban a Tlalmanalco en recaudación de impuestos
Tlalmanalco, Méx., 19 de junio. De los 18 municipios de la zona oriente del estado de México, esta localidad fue la peor calificada por el Órgano Superior de Fiscalización del estado de México (OSFEM) debido a su deficiente recaudación de impuestos y a su excesivo gasto en nómina durante el ejercicio fiscal 2007.
Debido a esto, este municipio gobernado por el perredista Raúl Fernando Sánchez Reyes no podrá obtener recursos económicos adicionales al presupuesto mensual de los gobiernos locales que cuentan con “finanzas sanas”.
El órgano que encabeza Octavio Mena Alarcón autoriza un incremento de 2 a 7.5 por ciento en las participaciones por concepto de eficiencia recaudatoria, y otro monto máximo de 7.5 por ciento por eficiencia en el manejo de la cuenta corriente.
En ambos casos Tlalmanalco calificó con cero, pues no cuenta con una buena recaudación y tiene un déficit hasta de 5 por ciento en su presupuesto anual, que es de aproximadamente 120 millones de pesos.
Ubicado al pie del volcán Iztaccíhuatl, este municipio de 60 mil habitantes también se caracteriza por el derroche de sus gobernantes, pues gastaron más de 400 mil pesos en una corrida de toros sin que a las arcas públicas ingresara un peso por el festejo.
En contraste, el municipio rural de Atlautla, ubicado en la zona del Popocatépetl, obtuvo una eficiencia administrativa que ahora le permite obtener 15 por ciento más de recursos respecto a los 70 millones de pesos que recibe anualmente.
Atlautla, junto con la localidad urbana de Valle de Chalco, alcanzó una calificación perfecta. Nezahualcóyotl, Amecameca y Chimalhuacán también recibirán recursos adicionales, aunque en menor monto.
En Nezahualcóyotl, donde viven un millón 225 mil habitantes, su gobierno obtuvo excelente calificación por concepto de recaudación de impuestos y recibirá 7 por ciento adicional, es decir, 127 millones de pesos anuales. No obstante, este municipio perredista no alcanzó la máxima calificación respecto al rubro de gasto corriente, y sólo recibirá cinco por ciento por ese concepto.
Chimalhuacán no pudo sanear su estado financiero por el gasto corriente, debido a que 50 por ciento de sus 68 trabajadores sindicalizados –de militancia panista– reciben sueldos excesivos. Incluso hay administrativos que ganan 48 por ciento más que los directores de área.