■ Las compañías que efectúan repavimentación no dieron información sobre rutas alternas
Severo congestionamiento vial en inmediaciones del AICM, por cierre del acceso sin previo aviso
Sin tomar en cuenta a los vehículos que se dirigen al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), procedentes de las avenidas Río Churubusco y Balbuena, Zaragoza y Hangares, todas con dirección sur-norte, el Gobierno del Distrito Federal, que construye una nueva base de concreto sobre el bulevar Aeropuerto, cerró, sin previo aviso, la circulación hacia la terminal aérea, creando un caos vehicular pocas veces visto, el cual se incrementó por la lluvia que no dejó de caer durante todo el día.
A las compañías constructoras que llevan a cabo las obras de repavimentación, sencillamente les bastó colocar tambos de color naranja, “rejas” de plástico y camiones y camionetas que obstruyeron el paso de los miles de automóviles, autobuses y camiones de carga, sin algún tipo de señalización que orientara a los conductores respecto de qué calles tomar como alternativa para llegar al AICM.
En más de un caso, hubo protestas y enfrentamientos entre trabajadores de las empresas constructoras y los conductores de los automotores afectados por el cierre de la circulación. Llegar a la Terminal 1 por el puente elevado que comunica desde el Viaducto Piedad hacia la Terminal 2 resultó todo un suplicio, pues la circulación de automóviles, a mediana velocidad, fue extremadamente lenta, lo que hizo que las unidades que tenían que arribar al aeropuerto perdieran demasiado tiempo, entre 30 y 45 minutos, cuando lo común es de entre 5 y 10 minutos.
Esta situación fue, para los operadores de taxis del Sitio 300, que recogen pasajeros que llegaban en vuelos del interior y exterior del país, motivo justificado de quejas, pues las dejadas que comúnmente les llevan una hora o poco más para ir y venir del interior del Distrito Federal al AICM, debido a lluvia y al cierre de las arterias que conducen a la terminal, se duplicó y en algunos casos triplicó.
Por otra parte, la lluvia no cesó en la mayor parte del día. Empero, de acuerdo con lo informado por José Luis Uribe Ortega, gerente de Comunicación Social del aeropuerto capitalino, “en ningún momento –hasta las 19.30 horas– se vieron afectadas las operaciones aéreas y los aviones continúan saliendo y llegando de manera normal”, afirmó.