Usted está aquí: jueves 12 de junio de 2008 Política Astillero

Astillero

Julio Hernández López
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■ Apoyos ■ España de Solá

■ Diplomático Creel

Chuchos y manlios

Ampliar la imagen DEBATE SOBRE EL PETROLEO. El Observatorio Latinoamericano de Geopolítica efectuó ayer la mesa-debate Sin petróleo no hay nación, con la participación de Ana Esther Ceceña, Pablo González Casanova, Miguel Concha, Víctor Flores Olea y Óscar González, en el Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM DEBATE SOBRE EL PETROLEO. El Observatorio Latinoamericano de Geopolítica efectuó ayer la mesa-debate Sin petróleo no hay nación, con la participación de Ana Esther Ceceña, Pablo González Casanova, Miguel Concha, Víctor Flores Olea y Óscar González, en el Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM Foto: Carlos Cisneros

Conjugación intensiva del verbo apoyar. La más castiza de todas, la que en la España inversionista recibió el gerente Calderón, con el mismísimo rey Juan Carlos empeñado en respaldar al mexicano, entre otras cosas en la famosa guerra contra el narcotráfico. Si la Iniciativa Mérida se atora en melindres legislativos gringos, ya está lista la Iniciativa Madrid que ayer llenó de elogios al panista que inclusive osó lo que en casa ni en sueños, es decir, caminar por la calle sin un virtual estado de sitio rodeándolo, infractor de protocolos porque al salir del Congreso de los Diputados, ante el que había hablado, no usó de inmediato el automóvil preparado para su salida sino que se lanzó a pie rumbo a la embajada mexicana para saludar a los allí presentes. Cierto es que no hubo garbo en el discurso felipense cuyas líneas más notables aparecieron sombrías y entrampadas, pues, dijo el náufrago de 2006 que “no es lo nuestro simplemente sobrevivir o sobrellevar circunstancias globales o administrar parálisis”; pero, bueno, seguramente la tarde taurina se le iluminó al matador michoacano al ver en los tendidos legislativos ibéricos a Antonio Solá, el publicista que sembró odio y división en México y que ahora en España, además de haber colaborado con el derrotado Mariano Rajoy, se dedica a promover, cual comisionista de lujo, el ingreso de capitales externos al Pemex que, asegura ese propagandista de elite, será inevitablemente abierto a la inversión privada.

Santiago Aventurero se porta hombrecito y expresa total apoyo a Gustavo Madero, el senador chihuahuense que lo ha relevado en la coordinación de los panistas que ocupan escaños. Creel, que aguanta vara mientras se extiende la versión de que ha sacado diplomático provecho de su más reciente descalabro, pues tendría en su futuro una embajada en Europa en cuanto termine, en agosto, su periodo como presidente de la mesa directiva del Senado. Germán Martínez, el presunto cirujano partidista, que en realidad opera con modos de carnicero, también ha encontrado su objeto de apoyo: el PAN y en particular los comicios de 2009, pues con esos propósitos electorales se habría hecho el desplazamiento del tibio Santiago.

El PRD chucho apoya al PRI manlio en la búsqueda de reformas en materia de política social. Esas modificaciones le parecen sustanciales al partido de tres colores porque sus dirigentes saben, por larga experiencia, que el erario volcado en programas asistenciales es un método arrollador para que en las urnas aparezcan resultados en favor del partido cuyo gobierno ejerce esas funciones de virtual compra de sufragios. El jefe Beltrones pretende que los cambios a la manera de ejercer el dinero destinado a lo social se den antes de que sea puesta a votación la reforma petrolera. Dando y dando. Pero hay resistencia calderónica, pues el plan electoral 2009 está a punto, gracias a la tecnocrática planeación de un tal Ernesto Cordero, en la Secretaría de Desarrollo Social, a quien sus subordinados ya hacen candidato presidencial en 2012 a cuenta de los supuestos éxitos que entregará el año venidero con curules al por mayor para la causa felipense. En la leva para apoyar una eventual revuelta en las sesiones de Xicoténcatl, el general Beltrones se ha hecho de reclutas del sol azteca, entre ellos el siempre colaborador Graco Ramírez, que ha anunciado alianza con los priístas para empujar la mencionada reforma en materia social que, como se ha dicho antes, deberá ir en pago adelantado por el voto de los tricolores (y de otros senadores dispuestos a ser enganchados) en el asunto petrolero.

Frente a la lista de los apoyos también crece la de los rechazos. Para empezar, y como si así se subrayara el inicio de la etapa posterior al movedizo Creel, ayer mismo la Junta de Coordinación Política del Senado anunció que no considera conveniente organizar una consulta ciudadana sobre el tema energético. Faltaba más: hacer debates, y luego consultas. El Ejército Popular Revolucionario, mediante uno de esos comunicados por Internet de los cuales no existe ninguna prueba de autenticidad, estaría advirtiendo que el tiempo de su espera se acorta, ante el silencio o la inacción del gobierno federal respecto a la desaparición de dos importantes guerrilleros. El EPR le entra a la especulación política y anuncia que nada bueno ni nuevo sucederá si el oaxaqueño Diódoro Carrasco, de largo historial como priísta aunque actualmente habilitado como voluntario en el PAN, bajo cuyas siglas es diputado federal, releva a Juan Camilo Mouriño. Carrasco, cuando gobernó Oaxaca, cometió similares actos represivos, según esa fuente armada cibernética.

Y, mientras en Hidalgo unos padres ñañús han logrado el registro, con subrayado y diéresis, del nombre de D_oni Zänä, ¡hasta mañana, en esta columna apoyadora!

 
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