■ En un esperado choque de titanes, el monarca mundial Italia se mide a Holanda
Hoy, en el grupo de la muerte, Rumania buscará dar la sorpresa ante Francia
■ Los Bleus se enfrentan a una nueva etapa sin Zidane
■ La azzurra: 40 años de no ganar la Euro
Zurich/Berna, 8 de junio. El grupo de la muerte entra en acción. El partido entre Francia y Rumania, el lunes en Zurich, enfrentará al favorito para llevarse el primer puesto de la llave C y al equipo más flojo en apariencia, los rumanos.
La actividad de este sector se completará en Berna, con el juego Italia-Holanda, lo que se anticipa como un choque de titanes, en el primer cotejo de gran nivel del certamen.
Doce de los dieciséis seleccionadores de la Eurocopa ven a Francia favorita al título, conducida por sus nuevas estrellas, Franck Ribery y Karim Benzema, aunque la realidad es más compleja.
Los galos tienen ausencias importantes respecto del equipo que fue subcampeón del mundo, ya que no estará Zinedine Zidane, el “héroe” del Mundial 1998 y “villano” del Mundial 2006. Además, Patrick Vieira, el muro defensivo de los Bleus, se recupera de un desgarro muscular y no jugará.
El técnico francés Raymond Domenech tiene en duda al atacante Thierry Henry, quien se recupera de golpes recibidos, por lo que podría alinear en ataque al dúo Anelka-Benzema.
Sin embargo, Rumania terminó en el primer puesto de su grupo de clasificación, delante de Holanda. Este menosprecio es una fuente de “motivación”, según el técnico Victor Piturca. A su vez, Adrian Mutu, su mejor delantero, dijo que esperan “dar la sorpresa”.
Italia, actual campeón del mundo, y Holanda acaparan reflectores; se trata de dos aspirantes al título que se presentan con importantes ausencias.
Las bajas
A las bajas definitiva del italiano Fabio Cannavaro y del holandés Ryan Babel, que al final no fueron incluidos en la lista de 23 convocados para este torneo, se une la ausencia para este duelo de los delanteros naranjas Arjen Robben y Robbie van Persie.
Robben se lesionó el sábado por la mañana y Van Persie se recupera de una elongación de un muslo. “Es un golpe duro para el equipo porque en la misma posición que Robben tuvimos que deplorar la baja de Babel”, lamentó el seleccionador Marco van Basten.
Los italianos acuden en busca de un segundo título europeo, después de haber ganado el primero hace 40 años (en 1968) y por continuar su dominio tras el Mundial 2006. “Vine aquí para ganar. Quiero levantar esta copa también”, aseguró el centrocampista Andrea Pirlo.