■ Mal inicio de uno de los organizadores
República Checa ganó 1-0 a Suiza
■ El helvético Alexander Frei, fuera por lesión
Ampliar la imagen El mediocampista checo David Jarolim es detenido por el suizo Valon Behrami, en el partido inaugural de la Eurocopa 2008 que los helvéticos organizan junto con Austria Foto: Ap
Basilea, 7 de junio. República Checa frustró hoy la fiesta a Suiza al derrotarla 1-0 en el partido inaugural de la Eurocopa 2008, que los helvéticos organizan junto con Austria.
El tanto de la victoria llegó en el minuto 69, gracias a Vaclav Sverkos, con un derechazo al palo izquierdo que dejó mudos a la mayor parte de los 40 mil espectadores que llenaron el estadio St. Jakob Park.
Los checos sumaron así sus primeros tres puntos en el grupo A, mientras Suiza tendrá que esperar a su próximo compromiso, el miércoles en el mismo escenario, ante Turquía, que a su vez perdió 2-0 con Portugal.
En el colmo del infortunio, y tras un primer tiempo de bajo perfil, los helvéticos sufrieron la baja por lesión –rotura de ligamentos cruzados en la rodilla izquierda– de Alexander Frei, goleador y capitán, quien en un choque con Zdenek Grygera notó cómo la articulación se le torcía más allá de lo natural.
La afición quedó consternada, y las lágrimas con las que abandonó la cancha el número nueve helvético no hacían presagiar nada bueno; estará fuera seis o siete semanas.
Sin embargo, Suiza salió con más ánimo en la segunda mitad. Al fin y al cabo jugaba delante de su público.
Hakan Yakin, el hombre que sustituyó a Frei, tuvo el 1-0 en su cabeza en el minuto 65, pero su remate se fue desviado a la izquierda del portero Petr Cech.
Suiza luchaba por el triunfo, pero la fortuna estuvo del lado checo. Cuando la defensa local iba saliendo un jugador rival devolvió el balón con la cabeza y tomó despistada a la zaga, entonces Sverkos aprovechó y su remate se convirtió en gol.
El partido se convirtió en un monólogo suizo, que estuvo en el minuto 80 muy cerca del empate. Un balón al área cayó a los pies de Tranquillo Barnetta, quien disparó de zurda, Cech rechazó y la pelota llegó hasta Johan Vonlanthen, pero su remate se estrelló en el larguero.