Perlas electorales
Cerca, pero mejor lejos
John McCain tiene un gran problema: es el candidato del mismo partido que George W. Bush, quien mantiene la distinción de tener algunos de los niveles de aprobación mas bajos en la historia. Aunque McCain y Bush se abrazaron hace casi tres meses y el presidente afirmó que haría todo lo que se le pidiera para apoyar la candidatura del republicano, dijo: “saben, si él desea que me presente, lo haré”. Pero hasta Bush reconoce que no es su mejor ayudante y agregó entonces que “si él desea, que diga, saben, ‘no lo apoyo’, también lo haré”. Mientras tanto, McCain ha repetido una y otra vez que el presidente tiene “una agenda muy ocupada”, para explicar lo obvio, que por lo menos en público la presencia de Bush, y su 28 por ciento de aprobación pública, no es lo mejor para lograr la meta de ser su sucesor. De hecho, hace sólo una semana el mandatario participó en un evento para la campaña de McCain, y lo que en un principio se programó como evento semipúblico en un centro de convenciones en Scottsdale, Arizona, fue de repente sustituido por un evento cerrado al público y los medios, celebrado en una residencia privada. Sólo se programó una foto pública en el aeropuerto, donde McCain despidió en la noche a Bush frente al avión presidencial. Se dieron la mano, el presidente no hizo declaración y todo duro menos de un minuto.
Firmes, presenten armas
El jefe del estado mayor de Estados Unidos envió una carta abierta a todos los integrantes de las fuerzas armadas con la orden de que se mantengan al margen de la política electoral. “Los militares tienen que mantenerse apolíticos en todo tiempo y en todas maneras. Siempre es y debe ser instrumento neutral del Estado, sin importar cuál partido está en el poder”, escribió el almirante Mike Mullen, el oficial militar de mayor rango de la nación, en un ensayo aparecido en una publicación militar. El New York Times reporta que nadie tiene memoria de un mensaje parecido que advierta a los militares de mantenerse al margen del debate político-electoral. Al parecer hay nerviosismo entre los altos mandos ante la posibilidad de que sus subordinados deseen participar en el debate nacional donde la guerra será uno de los temas principales de la elección. De hecho, hay preocupación sobre las opiniones expresadas por un coro cada vez más amplio de generales, almirantes y otros altos oficiales retirados que se han pronunciado públicamente contra una guerra que ha durado ahora más que la Segunda Guerra Mundial. “No estoy sugiriendo que militares profesionales abandonen toda opinión personal sobre temas sociales o políticos modernos. Lo que estoy sugiriendo –de hecho, lo que la nación espera– es que el personal militar ejecute la misión asignada a ellos y ponga a un lado sus tendencias partidarias. Las opiniones políticas no tienen ningún lugar en la cabina de los pilotos o el campamento o en la sala de conferencias”, afirmó el almirante Mullen. Los militares en activo tienen prohibido participar en la política electoral (aunque sí cuentan con derecho a voto). Al parecer, uno puede combatir y ocupar países en nombre de la democracia, pero no participar en ella.
McBush
Los demócratas y sus aliados están buscando promover el mensaje de que el candidato republicano John McCain y el presidente George W. Bush son gemelos. En videos, cuestionarios y propaganda diseñada para el Internet el objetivo es crear la imagen de un “McBush”. Para ver un ejemplo visite www.bush-mccainchallenge.com/video.html.
El candidato cool
Con gran atención a los asuntos de estilo sobre sustancia que suelen mostrar los medios en las elecciones estadunidenses –cómo se visten, cómo besan a sus parejas, cómo bailan, cómo se cortan el pelo, con quién coquetean, etcétera– no pasó desapercibido el “choque de puños” entre Obama y su esposa Michelle después de declararse triunfador para la nominación de su partido en un evento de celebración del martes pasado. Obama subió al podio, y ahí le dio un abrazo, un beso y un “choque de puños” a su esposa en un intercambio de 11 segundos, que según varios “analistas” y “expertos” fue una demostración de qué tan “en onda”, hip o cool, es el candidato, o como reportó el New York Daily News, “enfatizó la juventud de Obama y su capacidad de trascender los gestos políticos estereotípicos de las campañas del pasado, dijeron los expertos”.
Contacto íntimo
Si uno no es Michelle Obama pero desea tener algún contacto más íntimo con afroestadunidense, puede adquirir calzones con una imagen dibujada de la cara del candidato demócrata y el año “08” atrás. Los calzones estilo bóxer están a la venta por 29 dólares y el diseñador Andrew Christian promete dar un dólar a la campaña por cada uno que se compre. Comentó a los medios que está considerando diseñar un brassiere o camisola si Hillary es nombrada candidata a la vicepresidencia, pero ya descartó ofrecer calzones con la imagen de McCain, ya que no sólo es poco hip sino que seguramente no sería un gran negocio.