■ El disco cuenta historias de carreteras, hoteles y zaguanes, precisó el cantautor en entrevista
Jaime López engloba en Por los arrabales ficción y sexo fricción
■ Durante la grabación tratamos de abundar en los ritmos que se escuchan en los poblados, en el tex-mex, definió el cronista urbano
■ Hoy presenta el nuevo álbum en el Salón Los Ángeles
Ampliar la imagen La mayoría de las letras tiene que ver con mis relaciones íntimas, con varias mujeres para ser concisos, explicitó el intérprete de Vete derecho al infierno Foto: Notimex
Algunos lo prefieren como charlista, otros más temerarios lo definen como la quintaesencia del cronista urbano, la opinión de algunos más es que representa exactamente lo que debe ser un escritor de canciones y los más mesurados opinan que es un enorme cantautor; lo cierto es que todas estas opiniones/definiciones forman la figura cúbico/esférica del músico tamaulipeco Jaime López, quien ha aportado/tatuado grandes clásicos en la epistemé roquera en México, como: Ella empacó su bistec, Chilanga banda, La primera calle de la Soledad, Sácalo y Vete derecho al infierno, por citar únicamente cinco de su vasto arsenal. Hoy, Jaime López presenta su nuevo disco Por los arrabales (de forma congruente y sólo para ser precisos) en el Salón Los Ángeles.
Adentrándose en un hábitat que no le es del todo ajeno, en este nuevo álbum Jaime López experimentó con nuevos sonidos para darle uno arrabalero, mezcla de norteño, polka, country, rock y cumbia, “lo que suena en las fiestas de pueblos y a todos pone contentos”, dijo.
Carlos Avilez, artífice
Precisó que Por lo arrabales es una especie de álbum grupero y tropical hecho a sugerencia del productor Carlos Avilez, integrante del grupo La Cuca, quien “me convenció para hacer algo divertido; armó una banda de músicos en Guadalajara y empezamos a trabajar”.
Fueron dos años de ardua labor para plasmar en cada uno de los 13 temas diversas situaciones de la vida cotidiana, pero, sobre todo, las experiencias personales del artista: “El concepto de Por los arrabales es inherente, no buscamos algo ajeno, tratamos de abundar en los ritmos que se respiran en los poblados, en lo que llaman tex-mex; es decir, la música norteña está como base junto con el rock y alguno que otro detalle”.
Algunas canciones ya son conocidas, pero otras son inéditas, y Jaime López no nos quiere ver la cara de Tío Lolo y precisa: “La mayoría de las letras tiene que ver con mis relaciones íntimas, con varias mujeres para ser concisos, aunque no niego que en su momento todas tuvieron su exclusividad”.
Al hacer una reflexión a su anterior respuesta extiende: “Esas historias de romance no pertenecen a una lista: sólo estuvieron vivas por momentos y se construyeron en carreteras, hoteles y zaguanes”. Aunque precisa que no se trata de un material autobiográfico: “Engloba lo que es el nivel de la ficción y de sexo fricción”.
Las canciones que conforman Por los arrabales, además de la que da título al álbum, son: Lobo loco, Anillo de diamante, Tucán, Tan lejos del Niágara, Sírveme un agave, Condominio, Castillos en el viento, Doroteo, Nocaut, Sólo estaba blofeando, Alma de tabique y La dosis de tu amor, esta última es el sencillo promocional. En síntesis, sin alejarse de su estilo, Jaime López navega dentro del ambiente de cantina, donde las canciones de la rocola abren con un ligero zumbido que augura su inicio y que las mujeres bailan por 10 pesos una pieza.
Durante 2007 Jaime López lanzó tres discos No más héroes, por favor, Hotel garage y Arando al aire; sobre esta franja menciona: “No es que me la pase produciendo discos todo el tiempo, no tendría vida; lo que pasa es que luego permanecen un poco enlatados porque no existen los recursos de promoción, y ya cuando ingresa a los bolsillos algo de capital los publicamos como se debe. Además tengo otro inédito que grabé paralelo a Por los arrabales. No es fácil vender discos; hace poco una cantante me decía que hoy día ya no se puede vivir de la música, que hacer discos es absurdo, entonces le respondí: ‘peor es no hacerlos’”.
En la grabación de Por los arrabales participaron los músicos Caeto Quintana (guitarra), Carlos Avilez (bajo, bajosexto y guitarra), Mario Garibay (acordeón), Nacho González (bataca), Sheik López (sax) y Óscar Fuentes (teclados).
La cita para escuchar los clásicos y nuevos temas de Jaime López es hoy en el Salón Los Ángeles, ubicado en Lerdo 206, colonia Guerrero, cerca de la estación del Metro Tlatelolco, a las 21 horas. Entrada general 150 varos.