■ Elogia el Pentágono a China por su valiosa cooperación ante Norcorea
EU invertirá 15 mil mdd en construcción de una gran base militar en la isla Guam
Singapur, 31 de mayo. El secretario de Defensa estadunidense, Robert Gates, confirmó hoy aquí que Estados Unidos invertirá 15 mil millones de dólares en la construcción de una gran base militar en la isla de Guam, en el Pacífico.
Gates se refirió al tema en un discurso en la mayor conferencia sobre la seguridad en la región Asia-Pacífico, llamada Diálogo de Shangri-la, que tiene lugar desde el viernes en esta ciudad Estado.
“Para cualquier futuro gobierno estadunidense la política de seguridad en Asia se basará en el hecho de que Estados Unidos sigue manteniendo sólidos y duraderos intereses en esta región”, expresó el jefe del Pentágono.
Pese a las guerras en Irak y Afganistán y la desaceleración económica en Estados Unidos, Gates afirmó que su país “tiene la capacidad de estar involucrado” en diversas partes del mundo. “No queremos perder el interés en Asia”.
Asimismo, intentó ser equilibrado en sus comentarios sobre China y ofreció elogios al citar la “valiosa cooperación” de Pekín en las negociaciones para desmantelar el programa nuclear de Corea del Norte, y evitó hacer críticas demasiado severas.
Sin embargo, el alto funcionario estadunidense aludió a temas que han sido problemáticos, como los repetidos llamados de Estados Unidos para una mayor transparencia en los presupuestos de China en defensa militar.
Funcionarios de Estados Unidos han señalado a la prensa que desean dejar en claro las opiniones de Washington sin crear una confrontación abierta con Pekín.
El teniente general Ma Xiao Tian, segundo a cargo del Ejército de Liberación del Pueblo chino, respondió al afirmar que los gastos de defensa de su país se encuentran en un “nivel menor” comparado con los presupuestos de otras naciones desarrolladas.
Los propósitos estadunidenses de expansión militar en Guam datan de 2006, cuando Washington publicó sus intenciones de desplegar 8 mil marines procedentes de la base de Okinawa, en Japón, y adelantó que extendería la infraestructura en ese enclave castrense para garantizar la movilidad de fuerzas aéreas y poder recibir portaviones nucleares.
La iniciativa incluía, además, la construcción de otro emplazamiento militar en Radio Barrigada para un escudo antimisiles.