■ Llama la ministra de Educación Mónica Jiménez a cesar manifestaciones contra el gobierno
Detenidos unos 500 estudiantes durante protestas en Chile contra proyecto de ley
■ Jóvenes exigen mayor participación en las discusiones para reformar una legislación pinochetista
Ampliar la imagen Estudiantes chilenos que fueron reprimidos por la policía enfrentan a los uniformados en el centro de Santiago, cerca del palacio presidencial Foto: Reuters
Santiago, 28 de mayo. Más de 500 estudiantes fueron detenidos por la policía durante masivas protestas realizadas en Chile contra un proyecto de reforma a la ley de educación, en trámite en el Congreso.
Los estudiantes demandan una mayor participación en las discusiones del proyecto de ley, en el que consideran no fueron escuchadas todas sus propuestas, y un cambio más radical en el financiamiento prestado a establecimientos educacionales y universidades.
Asimismo, exigen que los colegios públicos ya no sean administrados desde los municipios, ni por el actual sistema de subvenciones entre el Estado y privados, que no fue acogido en el proyecto de ley enviado al Congreso.
Por los menos unos 200 estudiantes fueron detenidos en Santiago, de secundaria y universitarios, que intentaron iniciar una marcha por la Alameda; por lo menos un centenar de jóvenes fueron apresados en las inmediaciones del palacio de gobierno, La Moneda, que fue virtualmente aislado por miembros de las fuerzas especiales de la policía.
Otros 227 estudiantes, en su mayoría menores de edad, fueron capturados en la norteña Antofagasta, luego que ocuparan tres liceos en apoyo a la movilización.
La recién designada ministra de Educación, Mónica Jiménez, llamó a los jóvenes a deponer las protestas, tras manifestar que si no es aprobado el proyecto del gobierno, se mantendrá como hasta ahora la norma educacional heredada de la dictadura militar del general Augusto Pinochet.
Las movilizaciones forman parte de una ofensiva de estudiantes y profesores, que recrudeció durante las últimas semanas. Varios diputados han apoyado algunos de sus planteamientos.
El gobierno de Michelle Bachelet dice que no es posible modificar el proyecto, pues es parte de un acuerdo con la oposición.
El nudo de la disparidad social en Chile, según reconocen estudios oficiales, está en los desiguales accesos a la educación, la salud y la participación política.