■ La Máquina quiere coronarse tras casi 11 años sin conseguirlo y dejar atrás los fracasos
Debemos conservar la calma para cerrar un buen campeonato, advierte Zeballos
■ Conejo Pérez, quien ha estado en la banca, se dijo contento y desea culminar bien el torneo
Ampliar la imagen Pablo Zeballos se ha convertido en baluarte del cuadro cementero Foto: Reuters
Alegría y mesura reinan en La Noria tras la clasificación del Cruz Azul a la final del Clausura 2008, porque “sigue un paso importante, pero difícil; de los segundos lugares no se acuerda nadie”, indicó el portero Yosgart Gutiérrez al concluir el entrenamiento de este domingo.
“Sentimos una alegría inmensa, sería doble si conseguimos el título, pero ahora hay que mantener la calma para cerrar un buen campeonato”, agregó el delantero paraguayo Pablo Zeballos, autor del gol del empate ante el San Luis en el estadio Azul.
Para los Cementeros la discreción no resta emotividad, pero insisten en que irán paso a paso, en el camino de los objetivos que se marcaron para esta campaña.
“Hay mucha ilusión, mucha esperanza, y todos estamos en el mismo canal para darle otra estrella a esta institución”, agregó Gutiérrez, y aseguró que los jugadores están dispuestos a dejar “hasta la vida, si se puede, para darle una gran alegría a este club y a la afición que tanto nos ha apoyado y esperado por este campeonato”.
Óscar Pérez comentó que “es un momento muy especial, que siempre estuvimos buscando; se da después de mucho tiempo y es una oportunidad de oro para ser campeones”, apuntó el Conejo, quien se dijo muy contento porque, pese a estar en la banca, “soy parte del equipo, creo que los compañeros han hecho un gran trabajo y ahora hay que culminarlo”.
La sequía de 10 años y medio sin título podría llegar a su fin, pero nadie quiere hablar de los fracasos del pasado. “Ahora nos tocó a nosotros y estamos haciendo lo imposible por dejar atrás esos años en que Cruz Azul no llegaba”, concluyó Gutiérrez.
Antes de conocer que el Santos será su rival en la serie final, los celestes coincidieron en que les daba igual enfrentarse a ese equipo o al de Rayados, porque ambos son complicados y el campeón debe ganarle a cualquiera.
Zeballos consideró al equipo de la Comarca un adversario difícil porque “defensivamente empieza por un buen arquero, que tiene mucha experiencia; la zaga está compuesta por grandes jugadores, y del mediocampo para arriba, casi todos los partidos han anotado”.