Centenaria
El Diario*
Kermesse en San Pedro de los Pinos
Se hacen grandes preparativos
Anualmente una junta de prominentes vecinos de la Colonia San Pedro de los Pinos, situada entre Tacubaya y Mixcoac, organiza una kermesse que se efectúa casi siempre en un domingo del mes de Mayo.
Ahora iba á suceder de igual manera, pero, según dicen los organizadores actuales, se les anticiparon los miembros de la Junta de Mixcoac, y los de San Pedro tuvimos que retardar la nuestra. “Los aguaceros de los tres domingos últimos –agregan los tacubayenses– habrían de haber sido para nosotros; pero se empeñaron los de Mixcoac en que fueran para ellos, y se los cedimos.”
Los organizadores de la kermesse de este año, están activando sus preparativos para que la fiesta sea verdaderamente lucida, y se verifique el primer domingo de Junio próximo, repitiéndose probablemente en el segundo domingo del propio mes. Construirán sus “puestos” cubiertos con fuerte lona, para que por ningún motivo se tema un fracaso.
¡Con razón!
Tengo muy buen apetito
y una vida placentera,
porque el cigarro exquisito
Celestes, papel Chorrito,
fumo de Tabacalera.
Efectos del pulque
En el interior de una pulquería, situada en la calle del Niño Perdido, se disgustaron Feliciano y Fernando Ramírez, padre e hijo, respectivamente, porque el segundo no dispensaba respeto alguno al primero, quien le amenazó con darle una golpiza si no lo trataba con más consideraciones.
–Cómo quiere que lo respete si Ud. Mesmo me invita á emborracharnos, viejo zorro?
El padre contestó tal pregunta con un bofetón, que el hijo estimó como insulto, regresando el golpe y haciendo rodar al suelo a Feliciano, quien, levantándose ebrio de ira, se arrojó sobre su hijo, infiriéndole una herida en el pecho, con un cuchillo que llevaba.
La policía intervino y condujo á la sexta Comisaría á los dos, remitiéndose al herido al Hospital Juárez y al heridor á Belén.
Las flores de Mayo
Venid y vamos todos ¿á dónde? Á comprar inmediatamente cajetillas de cigarros “Flores de Mayo”, de la Compañía Cigarrera Mexicana.
¿Por qué? Porque están admirablemente hechos, saben á gloria y nunca se cansa uno de fumarlos.
CAL
*Se publicó de 1906 a 1917