■ El también precandidato Barack Obama elogia a Edward Kennedy
Insiste Hillary Clinton en que no dejará contienda; “soy la más fuerte”
Washington, 25 de mayo. La aspirante a la candidatura presidencial por el Partido Demócrata, Hillary Clinton, prometió no rendirse ante su rival, Barack Obama, al insistir en que es la mejor para enfrentarse al republicano John McCain, en medio de la polémica generada por los comentarios sobre el asesinato de Bobby Kennedy en 1968 y por los cuales ofreció disculpas.
“Estoy en la carrera porque aún pienso que puedo ganar por méritos. Creo que soy la candidata más fuerte para estar a la altura del senador McCain”, indicó Clinton al New York Daily News.
La senadora por Nueva York se disculpó el sábado tras los comentarios que hizo sobre el asesinato de Bobby Kennedy para defender su permanencia en la carrera por la nominación, durante una reunión con el consejo editorial del periódico Sioux Falls Argus Leader, de Dakota del Sur.
“Mi esposo no consiguió la nominación en 1992, sino hasta que ganó la primaria en California, a mediados de junio. Todos recordamos que Bobby Kennedy fue asesinado en junio en California. No lo comprendo”, dijo.
Analistas señalaron que con esa declaración la ex primera dama dio a entender indirectamente que se mantiene en la carrera porque en aquel entonces Bobby Kennedy fue ultimado antes de su nominación como candidato demócrata a la Casa Blanca.
Ante el revuelo, Clinton ofreció disculpas: “Lamento si mi comentario acerca de ese momento traumático para toda la nación –en particular para la familia Kennedy– resultó ofensivo de cualquier forma. Ciertamente esa no era mi intención”, indicó.
El ex presidente Jimmy Carter dijo que espera que los superdelegados se decidan en junio, y que Clinton debe entonces ser sacada de la contienda. “Aún no me he pronunciado públicamente, pero pienso que en ese momento ella deberá abandonar la campaña”, afirmó en una entrevista con el canal británico Sky News.
Clinton, quien marcha detrás de Obama en cuanto al número de delegados, aspira a que los superdelegados –los que tienen capacidad para votar por quien quieran– le den la victoria.
Por su parte, Obama, visto por algunos como heredero del legado de la familia Kennedy, elogió hoy al convaleciente senador Edward Kennedy –a quien fue diagnosticado un tumor cerebral maligno– al decir que era paladín de los pobres y de los desamparados, durante un acto en la Universidad Wesleyan, en Connecticut.