■ Para ser honestos los jueces tendrán que “emanciparse de los efectos de moda”, señala

El jurado de Cannes debe ir contra el espíritu de los Óscar, considera Sean Penn

■ Entre los galardones entregados ayer se premió el corto mexicano Historia de un letrero

Afp

Cannes, 24 de mayo. El cineasta y actor estadunidense Sean Penn considera que el jurado oficial del festival de Cannes, que preside, debe “hacer lo contrario” de los Óscar y “emanciparse de los efectos de moda” al elegir a los ganadores que serán anunciados el domingo.

En una entrevista concedida al diario francés Le Monde, Penn afirma que “la mejor manera de ser honesto es tratar de emanciparse de los efectos de moda.

“Debemos hacer lo contrario de la Academia de los Óscar, cuyo palmarés refleja un arte consumado de la manipulación, de un marketing muy bueno”, agregó Penn.

El presidente del jurado calificó la selección de esta edición de “muy buena cosecha”, y lamentó “que no haya habido más comedias en la competencia”.

Indicó que había pedido a los miembros “del jurado que no leyeran las críticas” de las películas, y calificó la revista profesional estadunidense Variety de “periódico obsceno, que desinforma” y que escribe sobre los filmes “desde el punto de vista del mercado”.

El jurado presidido por Sean Penn está integrado por los actores Sergio Castellitto, Natalie Portman, Alexandra Maria Lara y Jeanne Balibar, por los cineastas Alfonso Cuarón, Apichatpong Weerasethakul y Rachid Bouchareb, así como por la directora y autora de cómic Marjane Satrapi.

Primeros premios

Historia de un letrero, corto de seis minutos filmado en Tampico, Tamaulipas, del mexicano Alonso Álvaro Barreda, ganó el concurso de Internet organizado por la Oficina del Filme de Canadá y el Festival de Cannes.

Los internautas podían elegir entre nueve películas finalistas, de 650 propuestas, transmitidas en YouTube.

Numerosos premios paralelos son otorgados en ocasión del encuentro de Cannes, cuyo palmarés oficial será anunciado el domingo.

Por otra parte, la cinta Muro, del brasileño Tiao, fue distinguida la noche del viernes con el premio Una Mirada Nueva, galardón paralelo al festival de Cannes que recompensa al más audaz de los cortometrajes presentados en la Quincena de Realizadores.

Muro, de 18 minutos, es el segundo cortometraje de su director y productor.

El premio Una Cierta Mirada fue otorgado a la película Tulpan, del director kazajo Sergey Dvortsevoy.

Galardones suplementarios

El jurado de este premio, presidido por el cineasta alemán Fatih Akin, otorgó asimismo un premio del jurado a Tokyo sonata, del japonés Kurosawa Kiyoshi; un premio sorpresa del jurado a Wolke 9, de la alemana Andreas Dresen; el premio K.O. de Una Cierta Mirada al documental Tyson, del estadunidense James Toback, y un premio de la esperanza a Johnny Mad Dog, del francés Jean-Stéphane Sauvaire.

“Debíamos dar tres premios, entre ellos el Premio Una Cierta Mirada, pero a raíz de la calidad y la riqueza de la selección, el jurado pidió a la dirección del festival poder recompensar dos películas más”, declaró Akin.

Este año, la sección Una cierta Mirada seleccionó 20 películas, entre ellas Los bastardos, del mexicano Amat Escalante; A Festa da menina morta, del brasileño Matheus Nachtergaele, y Afterschool, del brasileño-estadunidense Antonio Campos.

Las operas primas aspiran a la Cámara de Oro, premio destinado a recompensar una primera obra de cualquier sección del festival.

Por años, Una Cierta Mirada estuvo fuera de concurso, pero actualmente un jurado especial otorga estos premios la víspera del anuncio del palmarés oficial.

Asimismo, la película húngara Delta, de Kornel Mundruczo, historia de amor trágica entre dos hermanos, fue distinguida con el Premio de la Crítica Internacional en la competición oficial del Festival de Cannes. La Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica premió también Hunger, del artista plástico inglés Steve McQueen, en la sección Una Cierta Mirada, y la belga El Dorado, de Bouli Lanners, en la Quincena de Realizadores. Por otra parte, el Premio del Jurado Ecuménico fue para Adoration, del canadiense Atom Egoyan.