■ Ayer se proyectó en Cannes el documental que el director serbio dedicó al futbolista
Kusturica me dio el respeto que toda persona necesita: Maradona
■ El Pelusa criticó al brasileño Pelé; dijo: “no tiene dignidad para hablar”
■ Defendió a Dinho, caído en desgracia
■ “Me cortaría la mano de Dios por caminar detrás de Julia Roberts”, confesó
Ampliar la imagen Maradona recibe un beso de sus hijas Giannina Dinorah y Dalma Nerea, en la presentación de la película en Cannes Foto: Ap
Cannes, 20 de mayo. El Dios del futbol, Diego Armando Maradona, llegó a Cannes de la mano del director serbio Emir Kusturica, quien buscó reflejar la fuerza de una leyenda viva en el documental Maradona by Kusturica, presentado hoy fuera de concurso en el encuentro francés.
Al igual que si se tratara de una gran estrella de Hollywood, Maradona entró en la sala de prensa abrazado de Kusturica, donde fue recibido por los periodistas que aplaudían a rabiar.
La fuerza y el carisma de Maradona sostienen un documental de hora y media en el que se repasan sus glorias, pero también sus fantasmas: el peor de todos lleva por nombre cocaína.
“¿Sabés qué jugador podría haber sido de no haber tomado cocaína?”, se preguntó el futbolista en la cinta. “Me queda el mal sabor de no saber quién hubiera sido”, añadió tras admitir que vive con gran culpa por ello.
Kusturica, quien se resiste a quedar en segundo plano en el metraje, pone voz al documental, que arrancó en 2005 y cuyo rodaje se prolongó dos años debido, en parte, a los altibajos del jugador. El realizador serbio bromeó sobre su “egocéntrica” presencia y señaló que se debía a que intentaba rellenar los huecos cuando no encontraba al futbolista.
Maradona by Kusturica es mucho más que futbol, drogas y rocanrol, música que ama el realizador y que no deja de sonar en la cinta, a excepción de una canción escrita e interpretada por Manu Chao.
El documental contiene un discurso político de primer orden en el que se ve al futbolista compartiendo tribuna con Hugo Chávez, Evo Morales o Fidel Castro. También se ve al jugador acusando de asesino al presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
Respecto del gran espacio que se da a la política en el documental, el ídolo del futbol argentino afirmó que “la política es algo que surgió de Emir. Yo hice siempre la vida en mi lugar, cuando hablaba de política en mi familia me escuchaban, pero parece que cuando uno se hace famoso ya no puede opinar” sobre ciertos temas, como el presidente George W. Bush y Estados Unidos.
“Emir me dio ese respeto que todo ser humano necesita, no por ser jugador de futbol no se puede opinar de alguien que es un asesino. Lo que yo quiero decir por medio de la película de Emir es que también puedo hablar, que puedo ser la voz de la gente”, recalcó.
“Esta película se ha hecho con el corazón y la libertad que tenemos nosotros para decir las cosas; queremos decir lo que no puede decir un montón de gente en el mundo”, agregó Maradona.
Pese a los documentales que existen sobre su figura, defiende el trabajo de Kusturica como el auténtico. “La película de Emir tiene todos los ingredientes para conocer al Pelusa. Me siento identificado”.
Su amor platónico
Asimismo habló de su amor platónico del cine: Julia Roberts. “Daría cualquier cosa para poder caminar detrás de ella en Cannes. Daría la mano que le hizo el gol a los ingleses, me la cortaría”.
El Pelusa también criticó al brasileño Pelé. Dijo que no tiene “dignidad” para hablar de él. “Si no hubiera hecho las cosas que hice en mi vida, Pelé no hubiera llegado ni a segundo; cuando él habla, negocia; él ya fue. Tendría que estar más cerca de los jugadores y no de (el presidente de la FIFA, Joseph) Blatter. No tiene dignidad para hablar de mí. Primero que mire lo que tiene, que lo tiene muy jodido. ¡Que no me joda!”, dijo.
Las declaraciones del argentino son una respuesta a las recientemente formuladas por Pelé, quien dijo: “Maradona fue un gran jugador pero, vea bien: no pateaba con la derecha, no cabeceaba... No era completo. Y hay otra cosa: ¿por qué tantos deportistas olímpicos pierden las medallas cuando son sorprendidos dopados y él no?”
El ex 10 de la selección argentina se puso del lado de Ronaldinho, cuestionado en el Barcelona, en el que él también jugó en los años 80.
“Me pasó a mí con (el ex presidente del Barcelona, José Luis) Núñez, no ha cambiado nada. Ronaldinho es demasiado buen jugador para que se le critique. Pido a los barcelonistas de verdad que lo retengan, si se va al Inter los va a vacunar. Ya les pasó con Rivaldo, Ronaldo, con Figo, a los que echaron por celos.”