■ Se clama por transparencia, dice su director
Inauguran la Escuela Mexicana de Archivos
La conservación y el manejo de archivos, fuente para preservar la memoria y base fundamental del historiador, propician un nuevo clamor mundial: sin archivos no hay transparencia, no hay memoria, no hay identidad, señaló Ramón Aguilera Murguía, fundador y director de la Escuela Mexicana de Archivos, en la inauguración de esta institución académica.
El acervo de documentos, principalmente gubernamentales, tiene importancia administrativa porque permite la rendición de cuentas y la transparencia, por resguardar la evidencia de los actos de los encargados de dirigir las instituciones. Sin embargo, su mayor importancia reside en que se convierte en la memoria de las sociedades, en la identidad de los mexicanos, lo que hemos sido y seremos.
Durante el comienzo de actividades de la naciente institución, José Cueli, siquiatra y colaborador de este diario, participó con la ponencia El concepto de archivos desde una perspectiva filosófica, mientras Ramón Alberch, director del Sistema de Archivos de Cataluña, disertó sobre los desa-fíos para este tipo de acervos en el siglo XXI.
La conservación de documentos siempre ha sido importante, como demuestran los ejemplos del siglo XVI que resguarda el Archivo General de la Nación. Sin embargo, se ha despertado un nuevo interés en la preservación, a partir de 2002, a raíz de la aparición de las leyes de transparencia, explicó Aguilera, quien de manera conjunta con Jorge Nacif, premio Nacional al Mérito Archivístico 1990 y miembro del Consejo Internacional de Archivos, fundó la Escuela Mexicana de Archivos.