■ Ratifica que suspenderá acciones armadas mientras esté vigente el grupo de mediación
El EPR pide que cese persecución en su contra para avanzar en el diálogo
■ Solicita al gobierno pruebas fehacientes de distensión; “no podemos esperar de forma indefinida”
■ Nuevo reproche a Ruth Zavaleta por hacer “oídos sordos” a propuesta de una ley de amnistía
El Ejército Popular Revolucionario (EPR) ratificó ayer que en tanto se mantenga vigente el grupo de mediación con el gobierno federal, cuya creación propuso hace unas semanas, seguirán suspendidas todas las acciones de carácter militar.
Sin embargo, demandó que la parte gubernamental “concrete su disposición al diálogo” dando muestras fehacientes de distensión, porque “no podemos esperar de manera indefinida”.
Más adelante el EPR destaca que en los próximos días se cumplirá un año de la desaparición de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, por lo que ratificó su exigencia de que sean presentados “con vida y en libertad”.
A decir de los eperristas, estas desapariciones forman parte de un conjunto de hechos que restan “autoridad moral” al gobierno para hablar de respeto a los derechos humanos.
En un par de comunicados –uno dirigido a la comisión de mediación y otro a la presidenta de la Cámara de Diputados, Ruth Zavaleta–, el EPR demanda que, como muestras de su compromiso con el diálogo, el gobierno federal –y el del estado de Oaxaca– cesen su campaña de hostigamiento e intimidación de líderes sociales; que se de- je de perseguir e investigar a quienes se considera que son parte de la organización, y que se suspendan los operativos de búsqueda y captura de los miembros del grupo rebelde.
Como parte de las pruebas de voluntad de diálogo el EPR solicita que mientras dure la intermediación se “realice el traslado inmediato de los presos políticos y de conciencia que están en el penal de exterminio de máxima seguridad número 1, El Altiplano: Ignacio del Valle, Felipe Álvarez, Héctor Galindo, Sergio Bautista Martínez, José Luis Durán Mata y Jacobo Silva Nogales”.
Asimismo, pide la puesta en libertad de todos los “presos políticos” del país, en particular de los que se encuentran en el penal El Amate, en Chiapas, donde se han llevado a cabo una huelga de hambre, y en los Loxichas, Oaxaca.
Juicio a torturadores y asesinos
Solicita también que se enjuicie a todos los gobernantes y funcionarios que participaron en la “fabricación de delitos”, torturas, detenciones sin sustento y asesinatos.
Por otro lado, en un comunicado dirigido a Ruth Zavaleta, se descalifican las críticas de la legisladora al EPR. Y aunque se dirige a ella como “respetable diputada”, le recrimina que haya planteado que el gobierno les haya abierto las puertas del diálogo, cuando dicha condición fue parte de una exigencia para que se presentara a los dos eperristas desaparecidos.
Asimismo, critica las descalificaciones de la perredista a quienes actúan de manera violenta, toda vez que no asume –dice el comunicado– que la violencia proviene esencialmente del grupo en el poder, “en complicidad con alguna gente que se dice de izquierda”.
El EPR le reprocha a Zavaleta la pretensión de darle consejos, porque “es una pena escuchar esto de una persona que es presidenta de la Cámara de Diputados y que ha hecho oídos sordos a la solicitud que se ha hecho de que se promulgue una ley general de amnistía para los presos políticos y de conciencia en el país”.
Finalmente, menciona que la perredista asumió una postura de que no puede haber diálogo sin dejar las armas, a lo que señala que el EPR tienen ya varios años combatiendo la injusticia.
Rechaza que no haya puesto nada para impulsar el diálogo: “¿Acaso no le basta que se ha hecho pública la detención-desaparición de nuestros compañeros Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez?”