■ Las fuerzas del orden realizaban un operativo para decomisar piratería y contrabando

Chocan policías y comerciantes en el tianguis de El Salado; 12 detenidos

■ Los inconformes prendieron fuego a pacas de ropa y bloquearon la circulación de Zaragoza

Mirna Servín Vega

Comerciantes informales del tianguis El Salado, en Iztapalapa, se enfrentaron con policías y granaderos luego de que éstos efectuaron un decomiso de aproximadamente 35 toneladas de mercancía de contrabando y piratería en el lugar.

El intercambio de palos, piedras y objetos que volaron durante casi media hora dejó un saldo de 12 personas detenidas y por lo menos seis lesionadas, además de una patrulla destruida.

La acción policial se llevó a cabo con la participación de aproximadamente mil 500 uniformados, quienes revisaron decenas de puestos ubicados en la lateral de la calzada Ignacio Zaragoza y la avenida Amador Salazar, donde se instala el tianguis.

El operativo, encabezado por personal de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y de la Procuraduría General de la República, comenzó a las 11:50 de la mañana; el zafarrancho se desencadenó por la inconformidad de los tianguistas de perder sus productos y conocer de la detención de algunos de sus compañeros, quienes tenían mercancía ilegal.

Ante ello, un grupo de personas, algunas de las cuales se cubrían el rostro con sus playeras, arremetió contra la patrulla T1229, a la que le rompieron los vidrios traseros, delanteros y laterales, hasta que la volcaron.

Luego prendieron fuego a pacas de ropa que ubicaron sobre los carriles centrales de la calzada Ignacio Zaragoza y el camellón, para mostrar su inconformidad y evitar que se llevaran más mercancía. El bloqueo afectó la vialidad por más de una hora.

Fue entonces cuando elementos del cuerpo de granaderos lanzaron cápsulas de gas lacrimógeno, lo que aumentó la intensidad del enfrentamiento.

Antes de que comenzara el operativo, los elementos policiacos rodearon el tianguis y los puestos donde se detectó la venta de pacas de ropa, así como otros artículos de procedencia ilícita. Hasta ese momento el despliegue y decomiso de ropa se llevó a cabo con tranquilidad.

En el enfrentamiento resultaron lesionados por golpes cuatro elementos del cuerpo de granaderos y por lo menos dos vendedores. También fue trasladada para su atención una mujer identificada como María del Rosario Martínez Ventura, de 57 años, quien sufrió una crisis nerviosa.

Seis agentes del Ministerio Público Federal dieron fe del aseguramiento de ropa introducida ilegalmente al país, lentes de marca, productos sin facturas, discos piratas de audio y video, autoestéreos y carátulas, entre otras mercancías electrónicas, cuya propiedad no pudo ser acreditada.

Con todo este material se llenaron aproximadamente 50 vehículos entre camiones y camionetas, los cuales fueron llevados a las bodegas de la PGR en Azcapotzalco, donde se hará el conteo final de lo decomisado.

A consecuencia de esta acción policial fueron aprehendidos cuatro hombres, tres de los cuales: Mario Castro Barrera, de 25 años de edad; Gabriel Meza López, de 32, y Ricardo Vega Pioquinto, de 28, fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal por delitos como piratería.

Uno más, Abel Valdés Villanueva, de 56 años de edad, fue remitido al Ministerio Público del fuero común, debido a que tenía en su poder autoestéreos y carátulas para éstos, cuya procedencia legal no pudo acreditar.

Posteriormente, tras el enfrentamiento, la policía capitalina detuvo a Antonio Sánchez Vásquez, de 21 años de edad; Julio César Ramírez Guerrero, de 18; Francisco Iván Peralta Vásquez de 18; Rolando Jesús Ledezma Molina, de 20; Alfredo Iván Bosque Aranda, de 21; Luis Antonio Calva Galván, de 37; Ricardo Rodríguez Sánchez, de 26, y Antonio Jacobo Tapia, de 55, quienes fueron remitidos a la agencia 50 del Ministerio Público para responder por los daños a la unidad policiaca, así como por los disturbios en la vía pública.

Sobre estos hechos, el jefe de la policía capitalina, Joel Ortega, advirtió que los operativos en este tianguis se realizarán con frecuencia, además de que se abrirán accesos para garantizar el paso de las fuerzas del orden al lugar.