Ahondan pesquisas sobre 11 allegados a Ulises Ruiz
El Ministerio Público Federal ha concentrado en 11 personas –funcionarios y ex funcionarios de la administración de Ulises Ruiz– las investigaciones en torno a la desaparición de los eperristas Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, entre ellos Jorge Franco Vargas, ex secretario general de Gobierno de Oaxaca y actual líder del PRI en esa entidad, revelaron mandos de la Procuraduría General de la República (PGR).
En tanto, fuentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) indicaron que no existe ninguna evidencia de la participación castrense en este asunto, y reiteraron que militares adscritos al estado de Oaxaca son ajenos totalmente al posible secuestro de los dos presuntos integrantes del EPR.
Sostuvieron que en la reciente información que se dio a conocer sobre este asunto por el general Alfredo Oropeza Garnica quedó en claro que no hubo participación de militares, al tiempo que se ha fortalecido la tesis de que habrían sido elementos de los cuerpos policiacos o personas afines al gobernador Ulises Ruiz quienes sí estarían presuntamente involucrados.
Prueba de la confianza en el general Oropeza y en sus afirmaciones, señalaron, es que el alto mando lo ha apoyado –paradójicamente con su silencio– en días recientes, cuando parece evidente la existencia de una confrontación sobre el asunto entre el gobierno federal y el de Oaxaca.
En tanto, fuentes de la PGR mencionaron que el líder del PRI en Oaxaca, Jorge Franco, así como el primo del gobernador, Romeo Ruiz, subdirector técnico administrativo de la Procuraduría General de Justicia del Estado, han sido señalados como probables implicados en la desaparición de los eperristas por al menos dos testigos, uno de ellos con “protección” oficial.
Según las versiones obtenidas, el comandante Pedro Hernández Hernández y el agente Angel Reyes Cruz, El Chicharrón, habrían participado como autores materiales de la desaparición, en el desarrollo de las operaciones que el gobierno oaxaqueño aplicó en contra de supuestos participantes en el movimiento de la Asamblea Popular de Pueblos de Oaxaca durante 2006.
Cabe recordar que el 25 de mayo de 2007, según el EPR, dos de sus integrantes fueron levantados en Oaxaca, y posteriormente desaparecidos por autoridades que no han sido identificadas plenamente.