■ Es Mouriño el principal problema de Campeche, afirma
Los privatizadores responden al “hambre de dinero”: AMLO
■ Critica a Andrés Granier por andar de “afanosito” con Calderón
Ampliar la imagen Los brigadistas deben informar a la ciudadanía sobre la intención de Felipe Calderón, Juan Camilo Mouriño y asociados de entregar el petróleo a empresas extranjeras, afirmó López Obrador en Villahermosa Foto: La Jornada
Villahermosa, Tab., 7 de mayo. En la lucha por el petróleo “nos enfrentamos a intereses muy fuertes”, manifestó Andrés Manuel López Obrador, después de afirmar que quienes insisten en privatizar ese recurso responden al “hambre de dinero” y al fomento de la corrupción.
Citó como ejemplo al secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, a quien, dijo, hay que “enjuiciar”. Al término de una reunión previa con brigadistas de Campeche, antes de arribar a Tabasco, señaló que el principal problema en ese estado es “Mouriño, que es una rata”.
Recordó que como presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados y después como funcionario en la secretaría del ramo, ese personaje incurrió en tráfico de influencias al firmar contratos para favorecer a su familia, y reprobó que intente, junto con Felipe Calderón y el grupo de empresarios que le apoyan, privatizar el petróleo.
Eso, apuntó, “tiene que ver con el hambre de dinero, con los negocios que se hacen al amparo del poder público”.
“¡Ratas de ratas!”, gritaban los brigadistas que hicieron eco a la exigencia de que no se concrete la entrega del petróleo a manos de extranjeros.
López Obrador remató: “esta familia (Mouriño) es la más rica de Campeche, de las más ricas del sureste. ¿Cómo han obtenido estas riquezas? A partir del tráfico de influencias”, y aún así (Juan Camilo) continúa en su puesto y “anda ahí, pegado a Calderón. Son tal para cual. Es la misma inmoralidad”, sostuvo.
Pero nosotros, advirtió, lo vamos a impedir y tenemos que aprovechar el tiempo que dure el debate en el Senado de la República, hasta finales de julio, para consolidar nuestra organización.
Asimismo, afirmó, debemos insistir en que se someta a consulta popular la aprobación de la reforma petrolera.
En la continuación de la gira que realiza por el país para reunirse con brigadistas estatales, López Obrador recorrió por carretera desde Mérida, Yucatán, hasta Villahermosa, y a la salida de Champotón pudo constatar el desarrollo del complejo inmobiliario Campeche Playa, propiedad de los Mouriño, el cual, según lo observado, abarca varias hectáreas y tiene capacidad para albergar un campo de golf. Además, se informó, para realizar la construcción tuvieron que desviar un tramo de la carretera con la finalidad de que la edificación quedara cerca del mar.
Al llegar al final de su recorrido de este día, después de que la camioneta que lo transportaba fue objeto de dos revisiones en igual número de retenes militares –instalados como parte de la lucha contra la delincuencia organizada–, el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal resaltó las acciones de resistencia civil llevadas a cabo tanto en la calle como en el interior del Congreso de la Unión para impedir que las iniciativas enviadas por Calderón al Senado se aprobaran en “sigilo”, y advirtió: “ni lo van a hacer ni van a poder”.
En éste, su estado natal, López Obrador fue recibido por sus paisanos en la plaza de armas de la capital entre vítores, aplausos y abrazos. Ahí, indicó que “no queremos que se sigan haciendo jugosos negocios al amparo del poder” ni que “siga la corrupción en Petróleos Mexicanos”.
Además, se pronunció porque “se acabe el cacicazgo” en el sindicato de la paraestatal.
Ante centenas de personas, el ex candidato presidencial cuestionó la actitud del gobernador de Tabasco, Andrés Granier, por estar de “afanosito con Calderón” al ofrecer su apoyo a la reforma energética y pedirle al panista que construya una refinería en la entidad. “Da pena ajena”, sostuvo, en medio de mentadas de madre de quienes lo escuchaban, dirigidas hacia el mandatario local.
“¿Por qué se lo pide a Calderón y no a Exxon o a Repsol? Realmente me da mucha pena que en mi estado haya un gobernador como este señor, un pelele del pelele. Aquí en Tabasco le llamamos de otra manera. ¿Cómo le llamamos?”, preguntó a la gente, y de inmediato se alzaron voces que gritaron: “¡Pendejo!, ¡burro!, ¡lambiscón!”
“En lugar de estar defendiendo el petróleo con todo lo que significa para Tabasco se pone de tapete para que Calderón haga de las suyas”, remató López Obrador.
Indicó que en la lucha por el petróleo no dará ni un paso atrás. “No somos arribistas ni trepadores ni luchamos por cargos públicos, sino por ideales, por principios. Vengo –sostuvo– a invitarlos a que sigamos adelante y a difundir, casa por casa, de lo que se trata”. Aprovechó para decir que al pueblo le corresponde opinar sobre este tema.
Más tarde, en entrevista, resaltó su demanda de que antes de cualquier reforma energética, después del debate convocado por el Senado, se realice una consulta popular a escala nacional.
Además, en respuesta a la oposición que ante ese planteamiento expresaron los coordinadores parlamentarios del PAN, Santiago Creel Miranda, y del PRI, Manlio Fabio Beltrones, respondió: “no hay que tenerle miedo al pueblo, hay que consultar a los mexicanos sobre el tema del petróleo”.
–¿Por qué la reticencia? –se le preguntó.
–Creen que van a poder sacar la reforma mediante acuerdo cupular de PRI y PAN, pero eso no va a ser fácil. Tiene que haber una consulta a todo el pueblo.