■ Un anticoagulante, la causa, según las autoridades; Baxter retira su fármaco heparina
Acusa China a farmacéutica de obstruir investigación sobre muertes
■ La Administración de Alimentos y Fármacos de EU halló el medicamento contaminado con una sustancia similar, pero más barata
■ El país asiático rechaza que sea el origen del problema
Pekín, 6 de mayo. Funcionarios chinos dijeron el martes que un anticoagulante fabricado en China no es el causante de una serie de muertes relacionadas con el producto, y acusaron al laboratorio Baxter International de obstruir la investigación sobre la causa del problema.
Baxter retiró lotes de su fármaco heparina en los que se encontró contaminación con un químico similar, pero más barato, al que los funcionarios de la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés)lo consideran el probable causante de la muerte de unas 81 personas y de reacciones alérgicas en otras.
Pero China asegura que el químico, denominado sulfato de condroitina hipersulfatado, no es el causante.
“Aparte de Estados Unidos y Alemania, ningún otro de los más de 10 países que usaron productos de heparina con la ‘sustancia similar a la heparina’ reportaron reacciones adversas”, señaló en un comunicado la Administración Estatal de Alimentos y Medicamentos de China.
Las reacciones también se produjeron con el uso de algunos lotes de heparina que no contenían el químico, añadió el escrito.
Pero en una conferencia de prensa, el martes, Jin Shaohong, del Instituto Nacional para el Control de los Productos Farmacéuticos y Biológicos de China, no explicó cómo el químico llegó a los lotes de heparina.
La heparina se usa en pacientes sometidos a diálisis renal y a otros procedimientos para prevenir la formación de coágulos. Se produce con intestinos de cerdo, que suelen recolectarse en pequeñas granjas chinas sin regulación.
El retiro de la heparina de Baxter fue el último eslabón de una cadena de problemas relacionados con la calidad de los productos provenientes de China, lo cual puso de relieve las fallas en el control y la corrupción de los reguladores chinos de alimentos y medicamentos.
Debate sobre control
Asimismo, el problema generó un debate en Estados Unidos sobre cómo controlaban los laboratorios de ese país sus fábricas ubicadas en el exterior.
El regulador sanitario de China señaló que Baxter no estaba cooperando con las autoridades asiáticas en la investigación sobre el origen del problema.
“Baxter no brindó la cooperación necesaria en el proceso de averiguación, lo cual no permite identificar los motivos de las reacciones adversas a la heparina”, añadió.
Baxter negó esa acusación. El laboratorio además destruyó algunas muestras del medicamento y registros de producción que China considera claves para descubrir la causa del problema, dijo Jin. “Me sorprendió mucho. Esto es extremadamente lamentable”, añadió.
Una portavoz de la compañía lo desmintió. “Hasta el momento, Baxter ha estado de acuerdo en brindar las muestras a la Administración Estatal de Alimentos y Medicamentos ante sus peticiones”, dijo Xing Rongwang, directora asociada de comunicaciones de Baxter en China.
“Hemos estado cooperando con todas las partes involucradas en la situación de la heparina”, añadió.
El caso ha generado dudas tanto sobre el control que ejercen los laboratorios estadunidenses sobre los productos que fabrican en el exterior como sobre la capacidad de China de vigilar a las compañías farmacéuticas.