■ México no se prestó a la estrategia del líder opositor, dice el embajador sudamericano
Bolivia, conforme con la negativa de la SRE a enviar delegados al referendo secesionista
■ El gobierno de La Paz espera que el Grupo de Río se manifieste sobre la integridad de las naciones
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Jorge Mansilla, embajador de Bolivia en México, recibió firmas de apoyo en contra de la secesión en el país sudamericano gobernado por Evo Morales
Foto: José Carlo González
El embajador de Bolivia, Jorge Mansilla Torres, se manifestó ayer conforme con la posición que adoptó México ante la petición del líder opositor Óscar Ortiz Antelo, para que el país enviara una misión humanitaria al referendo que promueve su partido en la provincia de Santa Cruz, para el 4 de mayo.
Con esa solicitud, el legislador quería ganar el aval del gobierno mexicano para las elecciones del domingo, pero México no se prestó a eso. Es una nación respetable de América Latina y nosotros estamos conformes con su decisión, puntualizó.
El lunes al mediodía, la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, recibió en “visita de cortesía” al dirigente de la oposición que organiza una consulta cuyo objetivo es lograr la secesión en Bolivia. Al terminar la reunión la dependencia emitió un comunicado de prensa en el que reiteró el compromiso del gobierno federal con los principios de no intervención y respeto a la soberanía de cada Estado. Señaló además que México seguirá apoyando todos los esfuerzos encaminados a preservar la paz y la institucionalidad democrática de Bolivia, respetando el orden constitucional, la unidad e integridad territorial.
Entrevistado luego que integrantes del Comité Mexicano de Solidaridad con Bolivia se manifestaron ayer en la representación diplomática en contra de la secesión, Jorge Mansilla agregó que ahora lo que su país espera es una declaración del Grupo de Río.
Informó que ya se está redactando el documento y estimó que posiblemente hoy se dé a conocer. Sobre sus términos, señaló que pondría énfasis en el respeto a la institucionalidad, la unidad y la integridad territorial de los países. También manifestaría su respeto a un gobierno democráticamente elec- to y al estado de derecho.
Héctor de la Cueva, miembro del Comité Mexicano de Solidaridad con Bolivia, informó que se recaban firmas en contra de la división territorial que fomenta la oposición boliviana.
Cuando al embajador se le preguntó sobre la validez de que la canciller Espinosa haya recibido a un líder opositor que plantea la ruptura institucional, manifestó que ese señor es el presidente del Senado de un país amigo de México.
No había por qué hacer la discriminación. Además, si se negaba a recibirlo hubiera incurrido en una barbaridad: la de tomar partido.