■ Un desperfecto en el motor de su Renault ocasiona el abandono de Fernando Alonso
Ferrari hace el 1-2 en el circuito de Cataluña; Raikkonen lidera el Mundial
■ Felipe Massa escolta al finlandés; el británico Lewis Hamilton llega en tercer sitio
Ampliar la imagen Los tres punteros de la carrera en el circuito de Cataluña Foto: Ap
Ampliar la imagen El auto del finlandés Heikki Kovalainen chocó contra una pila de ruedas; el piloto no sufrió heridas de consideración Foto: Ap
Barcelona, 27 de abril. El finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari) se adjudicó el Gran Premio de España, cuarta prueba del Mundial de Fórmula Uno, este domingo en el circuito de Cataluña, cerca de Barcelona, mientras Fernando Alonso (Renault) no pudo terminar la carrera.
Raikkonen logró la primera plaza, al tiempo que confirmó su liderazgo en el Mundial, al imponerse a su compañero, el brasileño Felipe Massa, y al británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), mientras el polaco Robert Kubica (BMW-Sauber) quedó en cuarto puesto.
Alonso, quien tantas expectativas había despertado entre el público local tras su segunda plaza el sábado, se vio obligado a abandonar en la vuelta 34, después de que se le rompió el motor.
Con estas dos primeras plazas, Ferrari alcanza el liderato en el Mundial de constructores.
El australiano Mark Webber (Red Bull) quedó quinto, mientras Jenson Button consiguió los primeros puntos para Honda esta temporada, con su sexta plaza.
Por otro lado, el japonés Kazuki Nakajima (Williams) y el italiano Jarno Trulli (Toyota) quedaron en séptima y octava plazas, respectivamente.
El susto de la jornada
El finlandés Heikki Kovalainen (McLaren-Mercedes) dio el susto de la jornada después de un choque con una pila de ruedas, luego de que un neumático izquierdo reventó. Trasladado a un hospital, el piloto no sufrió heridas de consideración.
Desde el principio el coche de seguridad tuvo mucho trabajo, pues Sutil chocó con Vettel, lo cual dejó a ambos fuera del circuito.
Como se esperaba, Alonso pasó por boxes en la vuelta 16, bajando de la tercera a la plaza 11. El accidente de Kovalainen, con la consecuente salida del coche de seguridad, alteró de nuevo la carrera.
Heidfeld, obligado a cargar gasolina cuando los boxes no estaban todavía abiertos, sufrió una penalización de 10 segundos, que arruinó todas sus posibilidades.
Cuando el coche de seguridad se hizo presente en la vuelta 27, los Ferrari tomaron la cabeza, al contrario de Alonso, quien en la 34 abandonó, y Rosberg (Williams) lo hizo poco después, en la 41, dejando 13 coches en la carrera.
“A pesar de nuestro problema en el motor, el coche era verdaderamente competitivo”, intentó consolarse el español.