■ Remedios para la hambruna en el planeta se están encareciendo, dice Estados Unidos

Alza en los precios de los alimentos se ha convertido en crisis mundial, advierte ONU

■ Países de Centroamérica analizarán alianza estratégica en la producción y comercialización

Reuters, Afp y Dpa

Viena, 25 de abril. El incremento de los precios de los alimentos se ha convertido en una crisis mundial, dijo el viernes el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon. Las preocupaciones crecieron esta semana al alcanzar el arroz récords en Asia y Estados Unidos advirtió de que los remedios para la hambruna mundial se estaban encareciendo. Por su parte, en Berlín, el jefe de la FAO, Jacques Diouf, sugirió que la comunidad internacional conceda subsidios a los agricultores del tercer mundo para compensar la ayuda estatal recibida por los campesinos del norte.

“Este abrupto incremento de precios de los alimentos ha evolucionado hasta convertirse en una auténtica crisis mundial”, dijo Ban a los periodistas en Viena. El descontento por los precios elevados de comida y combustible en los meses recientes ha generado protestas en varios países.

Los gobiernos de varias naciones agrícolas, preocupadas por la escasez nacional, han impuesto recortes a la exportación, asustando a los mercados en un momento en el que los inventarios mundiales están cayendo abruptamente.

Ban dijo que la crisis se abordaría en la reunión de responsables de organismos de la ONU el 28 y 29 de abril en Berna, Suiza. “Las Naciones Unidas están muy preocupadas ya que (son) todos miembros de la comunidad internacional”, dijo.

Ban indicó que la comunidad internacional necesitaba tomar acciones inmediatas y que los líderes mundiales deberían discutir formas de mejorar los sistemas de distribución y la producción de comida.

Japón anunció 100 millones de dólares en ayuda de emergencia el viernes y el director del Programa Mundial de Alimentos dijo el jueves que el coste de alimentar a los hambrientos del mundo había crecido casi 40 por ciento en medio de la espiral de precios y costes.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha dicho que está en conversaciones con gobiernos de diez países, principalmente de África, para incrementar la ayuda económica para cubrir el creciente coste de los alimentos.

En Panamá, los ministros de Agricultura, Ambiente y Salud de Centroamérica aprobaron una estrategia agroalimentaria que privilegia la producción de granos básicos y la productividad de las áreas destinadas a cultivos.

En Nicaragua, los ministros de Agricultura de Centroamérica, Haití, República Dominicana y países miembros de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) analizarán este sábado una alianza de producción y mercado de alimentos debido a la crisis alimentaria. La reunión fue convocada por el presidente Daniel Ortega que ha instado a los países a crear una alianza para aumentar la producción y abastecimiento de alimentos a precios justos.

A su vez, las adversas condiciones climáticas y las plagas harán que la cosecha de azúcar de este año en Centroamérica se reduzca en al menos cinco millones de sacos (de 60 kilogramos cada uno), informaron fuentes del sector. La merma fue calificada como “todo un récord” desde el azote del huracán Mitch en la región, hace unos 10 años, según expresó al diario Prensa Libre el director ejecutivo de los Azucareros del Istmo Centroamericano (AICA), José Orive.

Nuevas interrogantes para la OMC

Los crecientes costos de los alimentos y las restricciones a las exportaciones para asegurar el abastecimiento interno de arroz, trigo y otros productos básicos, colocan las negociaciones de la OMC bajo un nuevo foco, generando dudas sobre su alcance, dijo una ministra francesa.

Anne-Marie Idrac, subsecretaria de Comercio de Francia, señaló el viernes que las condiciones económicas habían cambiado radicalmente desde que comenzaron las conversaciones de comercio global, en 2001.

“Desde el punto de vista de la realidad social y económica, este es un contexto nuevo y diferente,” mencionó a los periodistas en la sede de la Organización Mundial de Comercio (OMC) en Ginebra. “Este nuevo contexto genera toda clase de nuevas interrogantes,” agregó.