■ Gondillo dejará que llegue quien sea, siempre que le permita mantener el poder, dicen en el SNTE

Fomenta Calderón lucha light en el gremio magisterial: CNTE

■ Ninguna figura elbista garantiza el control de los cacicazgos, advierten maestros disidentes

■ Cargaportafolios de charrros, Rafael Ochoa no tiene carácter para asumir “tarea de ruptura”

Laura Poy Solano

Integrantes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) aseguraron que la “lucha palaciega” que vive la cúpula elbista es parte de la disputa por el poder, pero también es resultado del desplazamiento de grupos políticos que, “se sabe, fueron de la estructura nacional, pues de 59 secciones sindicales en el país, Elba Esther Gordillo Morales pretende dar voz sólo a menos de la tercera parte dentro del Comité Ejecutivo Nacional (CEN)”.

“El riesgo que enfrentamos es el fortalecimiento de los cacicazgos locales y una dirigencia nacional cada vez más aislada y ajena a las decisiones que se tomen en los estados.

“Al pretender cerrar el círculo de la lealtad elbista con la creación de un CEN integrado sólo por 15 carteras nacionales, que ni alcanzan para garantizar la representación estatal, sólo falta conocer qué entidades se quedarán fuera y, con ello, qué grupos y liderazgos, pues ahí donde existan más de dos cuadros importantes vendrán las pugnas”.

Aseguraron que ni Sanjuana Cerda Franco –una de las colaboradoras más cercanas de Gordillo– ni ninguna otra figura elbista “podrá garantizar el control absoluto de los grupos caciquiles en el SNTE”, ante uno de los “momentos más difíciles que ha vivido el sindicato magisterial en las pugnas por el poder, porque es claro que para Elba Esther llegará a la dirigencia nacional quien tenga que hacerlo, siempre y cuando le permita continuar en el poder”.

En tanto, líderes históricos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) afirmaron que la disputa entre grupos gordillistas es una “estrategia más, orquestada desde el gobierno y su partido, porque Gordillo ha dejado de ser garantía de estabilidad tanto en el SNTE como en la Secretaría de Educación Pública (SEP)”.

La pugna entre un sector charril, que se asume como “líderes de cepa –es decir, con trayectoria en el SNTE–, contra otro, integrado por familiares de Gordillo y tecnócratas, no es más que una pelea por los huesos del poder, azuzada por el gobierno federal a través de una oposición light, que no representa más que a sus propios intereses”.

Por ello, calificaron de gatopardista la estrategia de la dirigente del SNTE para “simular un cambio, y que en los hechos, todo siga igual”.

José González Figueroa y Teodoro Palomino, líderes fundadores de la CNTE, afirmaron que en el gremio magisterial prevalece un “ajuste de cuentas interno, en el que Elba Esther pretende deshacerse del lastre de quienes considera que ya no le sirven, pero que no representan una ruptura con el grupo político en el poder, porque no son una verdadera fuerza opositora”.

Señalan que entre grupos institucionales “no hay contradicciones, mucho menos entre Gordillo y sus incondicionales más leales, como Rafael Ochoa Guzmán, quien inició su carrera de cargaportafolios de dirigentes charros, para después ocupar un espacio como operador de la cacique, pero nunca ha tenido carácter ni apoyo político para asumir una tarea de ruptura”.

En la lógica priísta, a la que pertenece la mayoría de los grupos afines a Gordillo, “es evidente que hay un reacomodo de los cacicazgos locales con miras a las elecciones de 2009, porque una vez cumplida la tarea en el proceso de 2006, quieren ver por los suyos y garantizar canonjías”, agregaron.

Repudio total a la maestra

Maestros “democráticos” de las secciones 9, 10 y 11 del Distrito Federal, y 36 del valle de México se manifestaron frente a las secretarías de Gobernación, Hacienda y Educación Pública, así como ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para exigir la derogación de la nueva Ley del ISSSTE y para reiterar su “repudio total” al cacicazgo elbista.

Profesores de primaria y secundaria de la zona metropolitana del valle de México afirmaron que entre la base magisterial “ha crecido el rechazo contra Elba Esther, quien nunca ha tenido el apoyo de los maestros. Estamos cansados de la indiferencia total de la cúpula elbista ante las necesidades de los docentes”.

Agregaron que tras el incremento en el pago del impuesto sobre la renta y los descuentos por la nueva normatividad aplicados en 2008, “ni siquiera recuperamos el ingreso salarial que teníamos a finales del año pasado, y ahora pretende vendernos un aumento que no llena las expectativas de los maestros, por eso ya ni recibimos en las escuelas a sus enviados”.