■ Los tres puntos, insuficientes para salir del sótano de la tabla de cocientes
El Veracruz da la voltereta y alarga la agonía por el descenso
■ Los Tiburones dependen de lo que haga el Puebla
■ Aprovecharon la superioridad numérica tras la expulsión de Óscar Razo
■ A cinco minutos del final Francisco Bravo hizo el tanto del triunfo
Ampliar la imagen El Pony Ruiz fue una pesadilla para la zaga de Chiapas Foto: Notimex
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 19 de abril. El Veracruz obtuvo una victoria de oxígeno puro en su visita a Jaguares, que había tomado tempranamente la delantera en el marcador. Sin embargo, el histriónico técnico visitante, Miguel Herrera, quien vivió el partido al límite de las emociones, hizo ajustes que derivaron en la voltereta para el final 1-2.
El triunfo no es suficiente para sacar a los jarochos del sótano de la tabla de cocientes, pero hubo una mejoría de 1.0505 a 1.0700. Ahora sólo les queda rezar para que los camoteros pierdan sus compromisos. Lo único claro es que el desenlace en el tema del descenso se alarga y con ello la agonía, ya sea la del Puebla o del mismo Veracruz.
Jaguares tomó ventaja por conducto del Bofo Bautista al minuto 22. Por Veracruz logró el empate Santiago Raymonda al 78 y la voltereta fue obra de Francisco Bravo al 85 de acción. Jaguares se quedó con 22 puntos en el grupo uno y los del puerto llegaron a 16 en el sector dos.
El golpe inicial
El partido fue deslucido, con escasas jugadas de calidad y abundante tensión y rispidez. Los más urgidos del triunfo eran sin duda los dirigidos por El Piojo Herrera y por ello de inmediato se fueron al ataque, pero con ineficacia y no tardaron en verse con el marcador en contra.
Adolfo Bautista recibió pase retrasado del brasileño Itamar Batista, el Bofo logró sacar su disparo ante dos defensas que intentaron taparlo, y clavó el esférico a la izquierda del portero Édgar Hernández. Veracruz se desmoralizó y estuvo cerca de recibir un segundo tanto al minuto 42, pero Itamar voló su disparo.
Herrera, en su área técnica, era un manojo de nervios y echó mano de sus hombres de banca; primero metió a Cesáreo Victorino por lesión de Claudio Graf, y en el complemento ingresó a Salustiano Candía y a Francisco Bravo, aunque su cuadro tardó en imponer condiciones y debió superar nuevos embates de los chiapanecos.
La reacción
Raymonda logró el 1-1 tras una serie de triangulaciones hasta que Rodrigo Pony Ruiz centró desde la derecha, Santiago colocó su remate lejos del portero que pese a su vuelo no pudo evitar el gol.
Los roces comenzaron cuando Armando Archundia amonestó a Óscar Rojas y a Omar Briseño; también pintó de amarillo a Itamar por un clavado en el área. Óscar Razo fue el más afectado con dos cartones preventivos, al 69 y 79 de acción, por lo que dejó a Chiapas con 10 hombres.
Veracruz aprovechó la superioridad numérica, merodeó con peligro el área local hasta lograr la voltereta. Bravo recibió pase por el centro, se dio una vuelta sobre su eje con la marca encima de Christian Sánchez, y sacó un buen disparo que impuso el 1-2 y dejó sin opción al guardameta Hernández.