■ Arturo Reyes y Sarah Tisdall expondrán en el vestíbulo del Palacio Legislativo
Hay compromiso social en la labor de un artista que va más allá de la política
■ “A los diputados en México les hace falta una embarradita de arte”, sostiene el pintor
Ampliar la imagen El pintor zacatecano Arturo Reyes, señala las limitaciones de los legisladores en el arte Foto: Alondra Flores
Ampliar la imagen La británica Sarah Tisdall presenta una propuesta optimista Foto: Alondra Flores
El compromiso social también puede manifestarse desde el arte, no nada más como política, lo que podría ser la labor de un diputado o un militante, reflexiona el pintor mexicano Arturo Reyes, quien retoma temas sociales acerca de la represión y la brutalidad policiaca en la muestra Telas embarazadas que se presentará en el recinto legislativo de San Lázaro.
Los movimientos sociales en Atenco y Oaxaca, el conflicto minero de Sicartsa en Lázaro Cárdenas, Michoacán, así como los plantones de 2006, después de la elección presidencial, son algunos de los sucesos que Reyes retoma en aproximadamente 30 óleos, realizados entre 2005 y 2008.
El artista, quien ha hecho gran parte de su carrera en el Reino Unido, precisa que la pintura Sicartsa está inspirada en una fotografía del enfrentamiento entre trabajadores mineros y la fuerza pública en Lázaro Cárdenas, en 2006, publicada por La Jornada.
Arturo Reyes comenta que la guerra también es recurrente en sus obras, porque es un tema presente todos los días, como las imágenes de Irak o Israel en los medios de comunicación. Sin embargo, considera que el sentimiento del espectador no debe ser necesariamente pesimista, porque una obra puede referir a la guerra, por ejemplo, en una sinfonía, y en un momento se hace a un lado el tema y se presta atención a la creación artística.
Un retrato de una persona que en la vida diaria se considere fea, puede gustar en una pintura por estar bien hecha, por expresar algo, “eso es precisamente el arte, donde la relación con la realidad es muy tenue y todo empieza a significarse mediante la pintura, es llevar la realidad al lienzo y convertirla en arte”, agrega el pintor zacatecano en entrevista con La Jornada.
Telas embarazadas, que da título a la muestra, es precisamente una alusión a ese algo que va a pasar, a salir de la tela, pero que cada individuo será el creador de sus conclusiones y tendrá la capacidad de reconocer los hechos que evocan la obra. “Pero es sobre todo la opinión de un pintor, como puede ser la de un abogado, un diputado o un albañil, pero yo opino con imágenes, es una visión metafórica.”
Cuestionado sobre el mensaje que le gustaría transmitir a los diputados que diariamente deambulan por el vestíbulo del salón de sesiones del Palacio Legislativo, Arturo Reyes señaló que la mayoría de los legisladores carecen de sensibilidad por la cultura y todo lo que saben sobre arte es muy básico.
“Los diputados están poco cultivados; cuando pasan a la sala de sesiones por lo menos que vean que la pintura no son sólo paisajitos, volcanes, la indita con su huacal y el burrito. La pintura es mucho más que eso. Al menos, que tengan una embarradita de arte.”
Al mismo tiempo, convocó a reconocer que hay un sector cultural que está trabajando, muchas veces de manera anónima: “hay poetas, escritores, pintores y artesanos, hay una actividad cultural constante, independientemente de que se den cuenta o no los diputados”. Entonces, el hecho de que se presente allí la obra es una oportunidad para prestar atención a este sector, y surge la esperanza de que descubran que la dimensión del arte es muy amplia y hay una sensibilidad por la vida social y política.
Reyes compartirá el espacio con la artista británica Sarah Tisdall con Cambio de marea, cuya obra central es una visión contemporánea pesimista del mural El hombre controlador del Universo, de Diego Rivera, que se encuentra en el segundo piso del Palacio de Bellas Artes.
La pintora, quien reside en México desde hace tres años, explicó que su propuesta no es menos optimista que la del mural pintado por Rivera en 1934, en el que mostraba las calamidades del capitalismo y el imperialismo, pero también al hombre nuevo, una sociedad renovada “y resulta que no es así, no ha cambiado mucho el mundo desde esa época, más bien ha empeorado porque ya no existen los países socialistas, vivimos un desastre ecológico, las guerras continúan y todos se preocupan sólo por obtener dinero”.
Otros 20 óleos y acrílicos de formato más pequeño completan la muestra, donde la guerra, el calentamiento global, el pesimismo y la desesperanza del mundo moderno son los temas centrales. “No hay mucha esperanza en el mundo”, indicó Tisdall durante la conversación.
Telas embarazadas y Cambio de marea se exhibirá desde el 14 de abril en el vestíbulo principal del Palacio Legislativo de San Lázaro, y la muestra permanecerá abierta al público hasta el día 18.