■ Sugerirá Hacienda que utilice equipos de monitoreo existentes
El IFE, obligado a justificar su solicitud de presupuesto
■ El instituto no podrá contratar personal con planta definitiva
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Leonardo Valdés Zurita, consejero presidente del Instituto Federal Electoral
Foto: Luis Humberto González
El Instituto Federal Electoral (IFE) deberá “motivar y justificar” de manera exhaustiva ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la ampliación presupuestal de mil 453 millones de pesos que solicitó para cumplir con las nuevas obligaciones que le impuso la reciente reforma en materia electoral.
Sin embargo, existen normas vigentes de la administración pública federal que le impedirían contratar personal, con miras a que se generen plazas definitivas para los nuevos empleados.
Además, Hacienda propondrá nuevamente al IFE que ajuste su solicitud para la compra de tecnología para monitoreo de radio y televisión, y sugerirá la utilización del equipo que actualmente operan algunas entidades públicas y, sobre todo, instará al órgano electoral para que presente una nueva distribución para la instalación de los equipos.
Esto, porque el IFE pretende la instalación de equipo de monitoreo en cada uno de los 300 distritos electorales, labor para la cual requiere –de acuerdo con sus cálculos– cerca de mil millones de pesos, tomando en consideración un gasto aproximado de 2.6 millones de pesos para cada una de las 300 juntas distritales.
Sin embargo, especialistas y funcionarios han señalado que es posible reducir algunos espacios para realizar el monitoreo, es decir, colocar los aparatos de acuerdo con el alcance de las frecuencias de cada emisora y no con base en la división geográfica electoral.
El IFE debe sustentar, además, la necesidad de la compra de equipos de cómputo para los 997 módulos encargados de alimentar al padrón electoral. De igual forma, debe explicar y documentar cada una de las plazas solicitadas y aquellas que se ubican como “regularizables”, esto es, las que pasado un lapso determinado se convierten en permanentes.
Esto se explica porque el IFE deberá enfrentar las restricciones del Presupuesto de Egresos de la Federación, específicamente el capítulo mil, relativo a la contratación de personal, y ajustarse a los cortes delineados por Hacienda para el segundo trimestre de este año.
El IFE argumenta que fueron los legisladores quienes determinaron el alcance de la reforma constitucional en materia electoral y que ahora es necesario contar con más de mil 400 millones adicionales para cumplir con sus responsabilidades, específicamente como administrador único de los tiempos oficiales a que tienen derecho los partidos políticos.