■ Amenaza con demandar a diario
Desmiente la pedalista Grassi haberse dopado
La medallista panamericana de ciclismo en Río 2007, Giuseppina Grassi, rechazó estar involucrada en un caso de dopaje positivo, y señaló que todo es para perjudicarla, al ser una de las candidatas para ir a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
Grassi, campeona nacional y líder del grupo de pedalistas que busca ir a la justa veraniega, dijo estar tranquila al respecto.
Ayer, un diario deportivo publicó la versión de que la atleta había dado positivo en un control, después de una competencia nacional, y que “una fuente tuvo el conocimiento de que la ciclista no pasó el examen, por lo que peligra su posible participación en la competencia asiática”, versión desmentida de inmediato por la Federación Mexicana de la especialidad (FMC).
“Hay mucha envidia, inclusive hablé con mi papá (Giuseppe Grassi, ex entrenador de Belem Guerrero) de que era mejor dejar de buscar ir a los Juegos Olímpicos para que así las demás (ciclistas estuvieran tranquilas”, explicó.
La deportista de origen italiano naturalizada mexicana abundó que al enterarse por los medios del supuesto dopaje “sentí coraje por la manera en la que me estaban difamando”.
Y advirtió: “Si me quieren hundir así no lo van a lograr. Estoy supertranquila porque sé que no hice nada malo; al contrario, eso me da más fuerza para seguir entrenando”.
En el comunicado de la FMC se informa que la pedalista ha sido sometida a 10 evaluaciones de esa naturaleza y en todas ha sido limpia, además de que la competidora “piensa demandar al diario (Récord)”.