■ La salida del director del plantel, punto de divergencia
Autoridades del CCH Sur avalan peticiones de alumnos
■ Prevén la apertura de la escuela para el próximo lunes
Ampliar la imagen Toma de las instalaciones del CCH Sur Foto: Alfredo Domínguez
Representantes de la asamblea estudiantil y autoridades del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), plantel Sur, iniciaron ayer un diálogo con el objetivo de llegar a acuerdos para la reapertura de ese centro educativo tomado por algunos alumnos desde la tarde del pasado martes, en protesta por los actos de porrismo que se suscitaron ese día.
Durante la negociación, en la que también participaron profesores y trabajadores, las autoridades –encabezadas por el director de la escuela, Jaime Flores Suaste; el secretario de asuntos escolares, Valentín Martínez, y por José Luis Moreno, de la Dirección General de CCH– aceptaron seis de los siete puntos del pliego petitorio formulado el pasado miércoles por la asamblea estudiantil.
El tópico que causó divergencia entre las partes fue la exigencia de los estudiantes de que renuncien los directivos del plantel, lo que Flores Suaste consideró “desmesurado”.
Las demandas no son resolutivas
Los estudiantes hicieron especial énfasis en que si bien las autoridades habían satisfecho la mayoría de las demandas, “éstas aún no son resolutivas”, ya que se analizarán hoy por la tarde en una nueva asamblea, a la que se invitó a toda la comunidad de ese plantel para que acuda en punto de las 13 horas.
En contraparte a los activistas que mantienen cerrado el CCH Sur, un nutrido grupo de estudiantes de cuarto y sexto semestres se manifestó contra el paro total y defendieron la labor de las autoridades, sobre todo de Valentín Martínez. Señalaron que la asamblea estudiantil “no representa al total de los alumnos”. Y exhortaron a los activistas a que “en lugar de exigir la salida de los directivos, trabajemos en conjunto para elaborar un plan de acción que establezca qué acciones tomar ante un nuevo ataque de los porros”.
Al finalizar la mesa de negociación, alumnos y autoridades firmaron un documento en el que se comprometen a trabajar por la erradicación de los grupos porriles; que no existan represalias en contra de quienes participan en el movimiento; la apertura de todas las asignaturas y grupos necesarios en cursos sabatinos e intensivos para ayudar al egreso; la posibilidad de presentar cuatro exámenes extraordinarios (actualmente son tres) por ronda; incrementar el préstamo de libros de la biblioteca: de dos a tres volúmenes por alumno, y en tiempo: de ocho a 10 días, así como la recalendarización de los días perdidos a raíz del paro.
Los representantes de la asamblea estudiantil insisten en que el futuro del movimiento se basará en la respuesta pronta de la autoridad a las demandas aprobadas por la asamblea de hoy ya que “con lo que se avanzó este jueves se puede dar salida al conflicto” y el paro podría levantarse el lunes.
En tanto que Flores Suaste insistió en entrevista que inclusive hoy mismo podría ser entregada la escuela para que se reanuden las actividades académicas.