■ El director y Robert Downey Jr. promueven la cinta en el país

Iron Man no tiene pretensiones políticas, asegura Jon Favreau

■ Sólo queríamos hacer una película entretenida, abundó el actor

Jorge Caballero

A pesar de que la cinta Iron Man trata sobre el frívolo creador de armas para el ejército estadunidense Tony Stark y su arrepentimiento/redención después de ser capturado por terroristas, quienes lo hacen trabajar para ellos, el actor que interpreta al superhéroe, Robert Downey Jr., y Jon Favreau, director de la cinta, afirmaron, de visita a la ciudad de México para promover el filme, que su intención al rodarla no se centró en un trasfondo político, sino en realizar una producción entretenida y que pudiera disfrutar la familia.

De buen humor y hasta bromista, Robert Downey Jr. aseguró que se sentía como si estuviera en una asamblea de la Organización de Naciones Unidas, después de que les entregaron los intercomunicadores mediante los cuales escucharían a los traductores.

Para Jon Favreau fue interesante plasmar el personaje de Marvel, dado que resultó como trasladar uno de esos seres mitológicos con una connotación de humor y, sobre todo, por la posibilidad de desarrollar un papel previamente planificado entre un actor y el director. “Para mí, Tony Stark, el científico multimillonario, era un cuate muy antiperfecto; quiero ser honesto al decirles que esperaba que me cuestionaran por qué decidimos llevarlo a la pantalla”, señaló Favreau.

El director agregó que para el papel de Iron Man “siempre consideré que lo debería interpretar Robert Downey Jr., alguien que le diera credibilidad a su personaje; no buscamos un Supermán que se viera superperfecto; para nada.

“Decidí que fuera Downey porque es un actor comprometido. Porque, como Tony Stark, ha tocado fondo, y ahora ha regresado con mucho más fuerza, con más energía y entregado a su profesión.”

La pregunta iba dirigida a Robert Downey Jr., pero al ver cómo el director se expresó de él mencionó en son de broma: “Mejor voy a dejar que Jon responda todas mis preguntas”.

Ya en tono más serio el actor reflexionó sobre los cuestionamientos anteriores, de que se considera una película politizada: “Pienso que todas las películas realizadas después del 11 de septiembre de 2001 son parte de situaciones. Hoy, siete años después de lo acontecido en Nueva York, todo lo que ocurre en el mundo es factible de ser abordado en una película, en relación con los acontecimientos reales o en busca del lado político; pero mejor hablemos de otras cosas”, señaló.

Agregó: “Quisimos mostrar una actitud al estilo de lo que ocurre en Star Wars; no queríamos manejar niveles como señala la historia después de la Segunda Guerra Mundial y de la guerra fría, en fin”, aseguró Downey Jr.

El cineasta intervino para apoyar su postura: “Queríamos una película de entretenimiento. A final de cuentas a la gente le gusta entretenerse, disfrutar de una buena película, y no vayan a creer que nos estamos tratando de mostrar evasivos con nuestras respuestas, no deben llevarse esa impresión”.

Iron Man, El Hombre de Hierro se estrena en el país el próximo 30 de abril.