■ Se inauguró el Centro de Exposiciones terminal 2 del Aeropuerto capitalino
Exhiben piezas de los sitios arqueológicos mexicanos incluidos en el Patrimonio Mundial
■ La muestra incluye piezas y fotografías de una decena de zonas catalogadas por la UNESCO
Con una muestra integrada con piezas y fotografías de los 10 sitios arqueológicos de México inscritos en la lista del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), titulada Nuestro Patrimonio de la Humanidad, se inauguró ayer el Centro de Exposiciones terminal 2, espacio que se ubica entre las puertas 5 y 6 de esa también recién inaugurada terminal del Aeropuerto Internacional Benito Juárez.
A diferencia de la sala de exposiciones que se ubica en la terminal 1, coordinada por el Instituto Nacional de Bellas Artes desde 1979, este nuevo espacio lo tendrá a su cargo el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por conducto de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones.
El convenio entre el instituto, el Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México, y ASA (Aeropuertos y Servicios Auxiliares) estipula que “ASA cede el espacio de manera gratuita, con el compromiso del INAH de mantener exposiciones de alta calidad. Es un acuerdo donde no hay ningún desembolso de fondos por parte de ASA ni del INAH para usar el espacio, el único costo será el que requieran las exposiciones y su mantenimiento”, comentó Alfonso de Maria y Campos, titular del instituto.
Nuestro Patrimonio de la Humanidad permanecerá durante seis meses. Reúne cerca de 20 piezas (de las cuales cinco son réplicas), procedentes de la Sierra de San Francisco, Baja California Sur; Paquimé, Chihuahua; El Tajín, Veracruz; Teotihuacán, estado de México; Xochicalco, Morelos; Monte Albán, Oaxaca; Palenque, Chiapas; Uxmal y Chichen Itzá, Yucatán, y Calakmul, Campeche.
Museografía y seguridad
Además de las fotografías de mediano formato, destacan esculturas zoomorfas y antropomorfas, estelas y columnas con bajorrelieves, acompañadas de cédulas informativas.
La idea a futuro para este espacio de 650 metros cuadrados y de 10.50 metros de altura, además de las exposiciones arqueológicas, es montar muestras paleontológicas, históricas, etnográficas, e integrar un par de terminales de video para proyectar documentales sobre los descubrimientos más recientes.
“Según el caso, se pondrían vitrinas para exponer determinadas piezas arqueológicas”, comentó Patricia Real Fierro, directora de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones.
“Eso nos lleva a la cuestión de la seguridad, por lo que se requerirá un cierto diseño museográfico que garantice la salvaguarda de las piezas, la cual estará a cargo del personal del aeropuerto”.