■ Mueren al menos 12 personas en combates de invasores e iraquíes contra la milicia chiíta
Recomienda jefe militar estadunidense en Irak congelar 45 días una retirada de tropas
■ Son “frágiles y reversibles” las ganancias contra la resistencia, afirma el general David Petraeus
Ampliar la imagen Un pacifista es expulsado por la policía durante la comparecencia del general Petraeus ante el Comité de Servicios Militares del Senado Foto: Ap
Washington, 8 de abril. En medio de protestas de grupos antibelicistas, el general estadunidense David Petraeus, máximo comandante de Estados Unidos en Irak, recomendó este miércoles ante el Comité de Servicios Militares del Senado que se congele durante 45 días, a partir de julio próximo, una retirada de las tropas desde esa nación ocupada militarmente.
El incremento de efectivos en el último año ha impulsado una mejoría de la seguridad, pero esas ganancias “son frágiles y reversibles”, argumentó.
La comparecencia del jefe militar fue interrumpida varias veces por manifestantes que reclamaron el fin de la guerra. Un hombre fue retirado por la policía luego de haber gritado varias veces “tráiganlos a casa”, en referencia a los soldados desplegados en Irak.
Petraeus recomendó a su cadena de mando “continuar con el retiro de las brigadas de combate enviadas como refuerzos y que al término del retiro de la última de esas (cinco) brigadas en julio, iniciemos un periodo de 45 días de evaluación y consolidación”.
El contingente militar de Estados Unidos en Irak se eleva actualmente a 158 mil hombres. Antes de julio ese número disminuirá a 140 mil soldados.
Petraeus y el embajador estadunidense en Irak, Ryan Crocker, quien también compareció ante el Congreso, fueron criticados por el presidente del comité, el senador demócrata Carl Levin, quien dijo que la interrupción de la retirada sería simplemente “la próxima página en un plan de guerra que no tiene estrategia de salida”.
Mientras tanto, por lo menos 12 personas murieron en combates de tropas estadunidenses y fuerzas iraquíes contra el Ejército de Mehdi, la milicia del clérigo radical chiíta Moqtada Sadr, en los suburbios del barrio bagdadí de Ciudad Sadr.
Además, Sadr amenazó con poner fin a la tregua iniciada en agosto de 2007 y canceló de forma indefinida la marcha que programó para este miércoles como conmemoración de la caída de Bagdad y contra la presencia de Estados Unidos por temor a que sus seguidores fueran atacados y evitar “un baño de sangre”.
En Afganistán otra nación invadida por Estados Unidos en la región, al menos 35 personas, 17 de ellas civiles y un soldado de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad, fallecieron durante varios ataques de los guerrilleros talibanes en el sur y el centro del país asiático.