■ Drenan gran parte de los presupuestos de las instituciones públicas de salud, señala
Destaca Horcasitas el alto costo social de las adicciones en México
■ Total apoyo del IMSS a la ley antitabaco; la institución se mantendrá “libre de humo”
Luego de informar que el Instituto Mexicano del Seguro Social apoya de manera decisiva la ley antitabaco a nivel nacional y local, su director, Juan Molinar Horcasitas, planteó que en México las adicciones, de cualquier tipo, tienen un alto costo social y deben ser atacadas de manera frontal.
Refirió que al menos 3.5 millones de mexicanos han consumido alguna vez una sustancia ilícita, que aproximadamente 7 por ciento de la población bebe alcohol de uno a cuatro días a la semana y que el tabaquismo es una de las enfermedades más serias que se padecen.
Entrevistado en un foro sobre adicciones, dijo que el tabaquismo tiene altos costos tanto para las personas que lo padecen como para la sociedad en general, y para las instituciones de salud en particular, las cuales destinan gran parte del presupuesto a la atención de las enfermedades que provoca esta adicción.
Dijo que en el IMSS ya se aplica de manera irrestricta la Ley de Protección a los no Fumadores y que toda la institución se mantendrá “libre de humo”.
También llamó a reducir el consumo de tabaco “tanto de los fumadores como de los que los rodean” y aseveró que con la aplicación de la legislación es posible evitar la muerte de muchas personas.
“Puedo asegurar que todos vamos a vivir más felices si reducimos el consumo del tabaco”, expresó y dijo que los fumadores deben dejar de consumir tanto cigarros como puros y respetar la ley.
Además se pronunció por que se lleven a cabo campañas para concientizar sobre el consumo de drogas y alcohol, así como del tabaco, ya que disminuyen la calidad de vida, por lo que deben darse a conocer los daños en la salud que provocan, así como las afectaciones sociales que traen consigo.
Estas adicciones también son un factor fundamental en “la incidencia de enfermedades crónicas; los accidentes de trabajo tienen alguna vinculación con el uso de sustancias prohibidas y al final de cuentas afectan el desarrollo de la familia”.
Por ello consideró necesario que diversos actores de la sociedad tomen acciones contra este tipo de adicciones, ya que según afirmó el director del IMSS; el consumo tanto de drogas, como de alcohol y tabaco también es un factor de desintegración familiar. Riesgos en la salud, afectaciones en el seno familiar y en los centros de trabajo, alto costo físico para las personas y un elevado costo para las instituciones, son algunos de los factores que provoca el fumar, esto debe crear conciencia sobre la necesidad de apoyar la ley antitabaco, apuntó.