■ México y Centroamérica son especialmente vulnerables a esa crisis, afirma el organismo
América Latina y el Caribe crecerán entre 4 y 4.5% por la desaceleración en EU: BID
■ La tasa es menor a la de 2007, también por el descenso de los precios de las exportaciones
Miami, 6 de abril. América Latina y el Caribe crecerán entre 4 y 4.5 por ciento en 2008, cifra inferior a la de 2007, debido sobre todo a una “desaceleración del crecimiento” en Estados Unidos, pero también a un descenso de los precios de las exportaciones de la región, consideró el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en su informe anual, que será difundido este lunes.
Durante el foro que realiza el organismo en Miami, el Instituto de Finanza Internacional (IIF), que agrupa a bancos privados, señaló que las economías que están “profundamente integradas con la de Estados Unidos estarán en mayor riesgo de una desaceleración”, y subrayó que México y los países centroamericanos son especialmente vulnerables.
Sin embargo, el secretario de Hacienda mexicano, Agustín Carstens, sostuvo que comparada con periodos anteriores, la economía mexicana es más resistente a la desaceleración de Estados Unidos.
En su informe, el BID señala que aunque las perspectivas de Latinoamérica para 2008 son favorables –a pesar de la inestabilidad que podría seguir afectando a los mercados financieros internacionales–, el incremento del producto interno bruto (PIB) regional será inferior al de 2007, cuando la economía latinoamericana creció 5.6 por ciento.
“La tasa será inferior a la de 2007, debido a la desaceleración del crecimiento en Estados Unidos, la posible moderación de los precios de los productos básicos que exporta América Latina y el surgimiento de limitaciones de la oferta en algunos sectores y países”, explicó la institución, que realiza hasta el día 8 su reunión anual en Miami.
El BID indicó que aunque los riesgos todavía son moderados para la región en conjunto y para casi todos los países, la situación podría modificarse, sobre todo si se produce una recesión en Estados Unidos, algo que, reconoció, “no se pude descartar” y que provocaría un descenso de dos puntos porcentuales del PIB regional.
El organismo explica que el principal riesgo que enfrentan América Latina y el Caribe tiene que ver con los mercados financieros internacionales, afectados por la crisis hipotecaria en Estados Unidos. Para mantener un crecimiento económico vigoroso señaló que es indispensable “mejorar la competitividad” y lanzó una advertencia sobre los niveles de inflación en algunas naciones.
El BID indicó que en 2007 alcanzó una cifra récord de préstamos aprobados por 9 mil 600 millones de dólares, y un monto máximo de dinero entregado en cuatro años desembolsado el año pasado, que ascendió a 7 mil 600 millones.
En un reporte presentado durante la asamblea anual del BID, el IIF señaló que la crisis en los mercados de créditos hipotecarios de alto riesgo ha tenido hasta ahora “sólo un impacto moderado en los mercados financieros de América Latina”. Sin embargo, este año y el próximo los riesgos colaterales se han incrementado a la luz de la creciente probabilidad de (una) extensa y sustancial caída económica, derivada de las turbulencias en los mercados globales de crédito.
Durante su intervención, Agustín Carstens afirmó que “la economía mexicana es más resistente a la desaceleración de la economía estadunidense”, al reconocer la alta dependencia de la actividad económica del país con la de Estados Unidos. El funcionario sostuvo que a diferencia de otros periodos de enlentecimiento en la economía de la primera potencia mundial, en este caso el precio del petróleo no bajó, sino que se mantiene con tendencia al alza. “Eso está ayudando mucho a México”.
Carstens explicó que en México el petróleo tiene un alto impacto fiscal, y no tanta importancia a nivel del PIB, el cual calculó en 2.8 por ciento para 2008.