■ El tenor da a conocer Cielo e mar de la mano del músico Daniel Barenboim
Con disco como solista, Villazón regresa a escenarios alemanes
■ El notable cantante mexicano ofrece conciertos en Berlín, Colonia y Munich
■ Flores, ositos de peluche, conejos de chocolate y una lluvia de besos enmarcan su primer recital
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El pianista Daniel Barenboim y Rolando Villazón son ovacionados por el públicó durante el recital que ofrecieron en la capital alemana
Foto: Geisler Photopress de Berlín
Berlín, 4 de abril. Con tres conciertos en esta capital, Colonia y Munich el tenor mexicano Rolando Villazón regresó a los escenarios alemanes para presentar su nuevo disco y primer recital como solista en su disco Cielo e mar editado por el sello de la afamada firma Deutsche Grammophon.
Villazón vuelve a cantar después de una pausa de casi seis meses y la afición alemana se volcó sobre el espectáculo agotando las localidades con semanas de antelación para las tres presentaciones.
En la capital alemana, el tenor se presentó en la Opera Unten den Linden, con Daniel Barenboim al piano, en un recital al cual asisitieron mil 400 personas que inclusive ocuparon parte del escenario.
El programa de Villazón en Berlín, con la complicidad de Barenboim, hizo resaltar no sólo la recuperada voz del tenor mexicano sino también su dominio de la lengua alemana en la interpretación de piezas clásicas.
El ciclo Dichterliebe (El amor del poeta) del compositor alemán Robert Schumann (1810-1856), con textos de su coterráneo el poeta Heinrich Heine, fue interpretado por Villazón con tal perfección que los aplausos del público se prolongaron 20 minutos.
Un joven asistente alemán, Marco, quien aseguró haber asistido por lo menos a 60 conciertos de Villazón en diferentes salas de Europa, resaltó que este ciclo de 16 composiciones de Schumann ha sido interpretado fundamentalmente por tenores alemanes.
“La pronunciación de Villazón fue perfecta, su dominio de la escena como buen actor, su simpatía, la pasión que imprime en sus actuaciones es lo que fascina al público alemán; este concierto en especial atrajo a los amantes de la música clásica que querían escuchar típicas piezas alemanas en la voz de este adorado tenor mexicano”.
Catorce arias
Al final del concierto en Berlín, cual estrella de rock, Rolando Villazón recibió del público, especialmente femenino, flores, ositos de peluche, conejos de chocolate y una lluvia de besos al aire que con gratitud y agrado respondía el mexicano.
Barenboim, en su momento, decidió cambiar un conejo de chocolate por unas flores, haciendo alusión gestual a su figura en contraste con la esbeltez del cantante.
Los tres conciertos que esta primavera ofreció Villazón en tierras alemanas se enmarcaron también en el contexto de la gira de presentación de su nuevo disco Cielo e mar.
Al tenor mexicano se le promueve en Alemania como “el mago de los sentidos con espíritu aventurero y una fenomenal voz”. Su nuevo material ocupa el primer lugar en los estantes de las tiendas de discos en Alemania y se reseña en revistas y periódicos.
Este disco-recital contiene 14 arias de las cuales se lee: “Villazón, críticamente aclamado y adorado explora el secreto de joyas de la ópera, perlas, un cofre con un tesoro de brillantes gemas olvidadas”.
En palabras del propio tenor, “este recital comienza con un mundo ideal de amor; después vemos cómo ese amor se puede transformar en enojo y venganza. Cada aria tiene un alma que llora estas emociones con pasión, desesperación alegría y dolor”.
Villazón interpreta a autores como Ponchielli, cuya obra Cielo e mar da título al disco, también de Cilea, Mercadente Verdi y Donizzeti, entre otros.