Estimados amigos:
Margarita Valdés, Juan Antonio Cruz Parcero y yo, Gustavo Ortiz Millán, entregamos una carta el
día martes 19 de febrero en la SCJN en contra de los recursos de inconstitucionalidad de la PGR
y la CNDH, y a favor de la reforma que aprobó la Asamblea Legislativa del DF, que despenaliza el
aborto antes de las doce semanas, apoyada por más de 90 miembros de la comunidad filosófica.
En la Corte solicitamos audiencias con los ministros. A la fecha, nos hemos encontrado con cuatro
de los once ministros (algunos de los otros no dan audiencia o están esperando a que circule la
propuesta de resolución, y será a partir de entonces que habrá audiencias públicas).
Varios ministros están abiertamente a favor de la penalización, entre otros, Salvador Aguirre
Anguiano, un ministro conservador que presentará el caso ante la Corte. Hay muchas probabilidades
de que echen para atrás la reforma de la ALDF. De que pase esta ley depende que otras
legislaturas estatales pasen leyes similares.
Adicionalmente, los ministros reciben más de 25 correos electrónicos al día, postales de diversos
tipos, dibujos de niños, etc., todos en contra del aborto y objetando la reforma. Los ministros
tienen más citas con miembros de la sociedad civil que están en contra del aborto que con gente
que está a favor de la despenalización. Los movimientos pro-vida están muy bien organizados y
están haciendo mucho cabildeo con los ministros. Además, cada día aparecen más anuncios en
las calles en contra del aborto y a favor de los “derechos del concebido”.
En comparación, quienes apoyan la despenalización no están haciendo casi nada. Pareciera
que los liberales en la cuestión del aborto piensan que su causa y sus argumentos son tan evidentes que no tienen que molestarse en hacerse oír por quienes van a tomar una decisión que
le afectará a toda la sociedad.
Escribo ahora para pedir que cada persona escriba, a título personal, a los ministros de la
SCJN, para exponer lo que piensa acerca del aborto; den argumentos. Tómense unos minutos
para escribirles. Si es posible, hagan citas y hablen personalmente con los ministros. Ellos tienen
el deber de recibir a todas las personas que les pidan citas (para eso les pagamos, y les pagamos
muy bien). Abajo están los correos electrónicos de los ministros.
Si perdemos esta lucha —si nos hacen lo que le hicieron a Lydia Cacho—, va a ser en parte
culpa de quienes pudieron haber alzado su voz y no lo hicieron.
Atentamente,
Dr. Gustavo Ortiz Millán (UNAM)
Guillermo Ortiz Mayagoitia:
[email protected]
José Ramón Cossío Díaz: [email protected]
Sergio Valls Hernández: [email protected]
José Gudiño Pelayo: [email protected]
Juan Silva Meza: [email protected]
Olga Sánchez Cordero: [email protected]
Margarita Luna Ramos: [email protected]
José Franco González Salas: [email protected]
Genero Góngora Pimentel: [email protected]
Mariano Azuela Güitrón: [email protected]
Sergio Aguirre Anguiano: [email protected] |