■ Censuran el “poco apego a las formas” de Leonardo Valdés al hacer la propuesta
Consejeros del IFE rechazan la idea de exhibir boletas de los comicios de 2006
■ El plan no toma en cuenta el largo trayecto legal que ha tenido la discusión del tema, señalan
La propuesta de “exhibir públicamente” las boletas de los comicios presidenciales de 2006, que hizo recientemente el consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Leonardo Valdés, recibió el rechazo unánime de sus colegas, quienes deploraron que el planteamiento nunca les fue comentado.
Las descalificaciones de algunos consejeros se refirieron a las “formas” de Valdés. Otros fueron más allá y censuraron la postura del titular del IFE, que no se hace cargo del largo proceso legal seguido en torno al tema.
Valdés retomó el tema ayer con una óptica muy diferente de su anuncio hecho en Semana Santa: “Yo lo que dije es que es una idea. El instituto está gobernado por un cuerpo colegiado, de tal suerte que la idea del consejero presidente, o de los demás consejeros, no es una decisión hasta que se vota en el Consejo General”.
El viraje del discurso de Valdés obedeció claramente a las censuras que recibió por sus declaraciones en torno a hacer públicas las boletas de la elección presidencial antes de ser destruidas. Ni aquellos consejeros que en su momento pugnaron por el acceso a esos documentos le ahorraron críticas, aunque las dirigieron al “poco respeto a las formas” sobre la toma de decisiones colectiva en el IFE.
En otros casos, se recordó que el asunto de las boletas electorales no es reciente y que había recorrido ya una larga trayectoria a partir de los recursos legales que ciudadanos interpusieron tras la negativa de la Comisión de Transparencia a abrir el acceso a esos materiales.
De entonces a la fecha ya se han pronunciado sobre el tema el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y la Suprema Corte de Justicia de la Nación, otorgando razón al IFE para proceder a la destrucción de la papelería.
La propuesta de exhibir las boletas de la elección presidencial no implicaría solamente los casi 43 millones que fueron utilizadas formalmente, sino también el resto que no se usaron, para verificar que estaban en los paquetes. Esto implicaría exhibir más de 70 millones de unidades.
Valdés consideró ayer que fue claro “al exponer que se trata de una idea que puede convertirse en una propuesta. Ciertamente esta propuesta puede tener consenso y convertirse en un procedimiento”.
Para que esto suceda, dijo, habrá que esperar a que se agote la vía jurisdiccional y se desahogue el último recurso que aún está abierto en un juzgado de distrito, aunque ya hubo un pronunciamiento que fijó criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “Hasta que este recurso no se resuelva, el IFE no puede hacer absolutamente nada porque estamos impedidos por ley”, concluyó.