■ Amazonas del arte nuevo se presenta en un instituto de la Fundación Mapre, en Madrid
Carrington y Kahlo representan a México en colectiva de 40 mujeres “guerreras”
■ Muestran creaciones pertenecientes a diversos movimientos y estilos entre 1880 y 1950
Ampliar la imagen
Leonora Carrington, en imagen de 2005
Foto: Guillermo Sologuren
Madrid. Las pintoras Leonora Carrington y Frida Kahlo representan a México en Amazonas del arte nuevo, exposición que reúne obras de 40 “guerreras”.
La muestra se presenta en el Instituto de Cultura de la Fundación Mapre, en Madrid, y concluirá el 30 de marzo.
De hecho, la institución inició una línea de actuación en 1999 con la muestra Fuera de orden, que consistió en reivindicar el papel desempeñado por la mujer en el desarrollo del arte moderno.
Ahora se ha trascendido el arte español para abordar creaciones elaboradas por una selección de autoras, de diferentes nacionalidades –algunas prácticamente desconocidas, apenas estudiadas–, representativas de distintos movimientos y estilos entre 1880 y 1950. Las protagonistas de Amazonas... pertenecen a las primeras generaciones de mujeres artistas que, salvo algunas excepciones, se mantuvieron en primer plano dentro del mundo del arte.
Convivieron, se mezclaron, expusieron junto a los hoy identificados como los “grandes creadores masculinos de su época”.
Formaron parte activa de las corrientes artísticas y aportaron puntos de vista que las convirtieron en referentes en la historia del arte moderno.
Las secciones de la exposición agrupan a las artistas de acuerdo con el movimiento al que pertenecen y las características formales sobresalientes en su obra.
La primera, Cambio de siglo, reúne a Mary Cassatt, Anna Boch, Louise Breslau, Suzanne Valadon y Romaine Brooks, pioneras en formarse en las academias y en exponer en los salones, a la vez que contaron con el apoyo y reconocimiento de sus contemporáneos.
Alrededor del expresionismo comprende a Marianne von Werefkin, Kathe Köllwitz y Mela Muter, cuya obra se acercó en un momento dado a los tratamientos formales pictóricos del movimiento alemán. Breve interludio futurista muestra la personalidad de Valentine de Saint-Point, integrada en este movimiento italiano.
La sección Vanguardias rusas rescata algunas de las artistas fundamentales de este momento de máxima creatividad occidental, en el que el trabajo de hombres y mujeres está equiparado: Nathalia Goncharova, Liubov Popova, Alexandra Exter, Maria Vorobev Marevna y Olga Rozanova.
El surrealismo de Leonora
Hacia un realismo mágico manifiesta “la existencia y proliferación del retorno a la figuración que se dio inmediatamente después de la consagración del cubismo y en paralelo a la consolidación del arte abstracto geométrico, que reivindicaba las formas concretas partiendo de la reconstrucción cubista”.
Sus diferentes bloques se han armado así: María Blanchard, Suzanne Roger, Chana Orloff y Ángeles Santos; Marie Laurencin, Tamara de Lempicka y Meraud Guevara; Grethe Jürgens, Gerta Overbeck-Schenk y Charley Toorop; Frida Kahlo, y Georgia O’Keeffe.
Bajo el signo del purismo y de la abstracción aproxima al visitante a Marcelle Cahn, Francisca Clausen, Marthe Donas, Florence Henri, Katarzyna Kobro, Nadia Léger, Maria Nocz Borowiak y Sophie Taeuber-Arp.
En La era fotográfica la técnica impera sobre las tendencias estilísticas para integrar a Claude Cahun, Dora Maar, Lee Millar y Florence Henri.
Por último, La constelación surrealista reagrupa a pintoras menos conocidas: Marie Toyen, Kay Sage y Maruja Mallo, cuya obra está influida por la corriente impulsada por André Breton; así como a la pintora y poeta inglesa Leonora Carrington, radicada en México desde 1942.
De esta “reconocida y ortodoxa surrealista”, quien el 6 de abril cumplirá 91 años, se presentan dos obras de los años 50 y 80, que muestran “cómo el surrealismo sigue influyendo” en su obra.