■ Busca que el gobierno coordine actividades para mexicanos pobres
Planean diputados modificar ley del sector turismo; transformaría Fonatur
La Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados propondrá, antes de concluir el actual periodo ordinario de sesiones, una nueva ley para regir al sector, que incluya la transformación de Fonatur, con objeto de que éste ya no enajene bienes públicos a empresarios ligados al gobierno.
Octavio Martínez, presidente de la citada comisión, sostuvo que la secretaría del ramo carece de facultad para aplicar políticas de crecimiento en el sector, pues sólo coordina y establece convenios de reasignación económica. También observó serios problemas para el turismo en México, porque si bien es el séptimo país más visitado del mundo, ocupa el décimo quinto lugar en el rango de los turistas que menos gastan.
A decir del representante perredista, se pretende identificar los productos de todos los ayuntamientos; “queremos reformar Fonatur, pues sólo da mantenimiento a los centros integralmente planeados, no genera polos de desarrollo, no es un fondo de fomento ni apoya con recursos a la pequeña y mediana industria”.
Hoy, refiere, los principales polos turísticos han generado miseria porque no se ha involucrado a la sociedad. Se trata de darle responsabilidades nuevas, porque la Secretaría de Economía ha retomado algunas actividades que corresponden a Fonatur.
–¿Qué pretenden con el turismo social?
–Como grupo parlamentario es un tema indispensable. Que el gobierno coordine las actividades turísticas para el mexicano con escasos recursos. Lo datos que tenemos son lamentables: sólo tres de cada 20 mexicanos han viajado en avión, muchos no conocen la playa, ni siquiera de sus propios estados.
–El sector turístico en México aún presenta enormes disparidades, ¿cómo van a paliarlas? –se le interrogó.
–Vamos a crear un capítulo en la ley: de turismo accesible. En México no existen playas con servicios para las personas con discapacidad física: lo que hemos decidido es plasmar en esta ley que todos los prestadores de servicios creen la infraestructura necesaria para acondicionar en instalaciones públicas y privadas obras para discapacitados.
“Además, los hoteleros hoy día le cambian de estrellas a su criterio y consideración; no se cumple la norma oficial mexicana, es ambigua y eso va en perjuicio del turista, pues se siente burlado; por eso prefiere ir a otros países, donde lo que se ofrece es serio. Obviamente la Secretaría de Turismo no tiene facultad para solucionarlo; esto sólo pasa en México”.
–Entonces ¿qué facultad tiene la dependencia del ramo?
–¡Ninguna! No tiene facultad de sancionar, nada más coordina y establece convenios de reasignación económica, lleva algunos parámetros económicos de cómo va la afluencia turística: tanto, pero no hay más.
–¿Por qué le molesta la transversalidad al gobierno?
–Hay algunos secretarios de estado que no les gusta esto, quizá sienten que están en riesgo sus áreas; si no creamos este instrumento para los futuros gobiernos y el actual, estamos amolados. Este tema es una herramienta importante para nosotros, representa el 7 por ciento del PIB, es el más importante después del petróleo y de las remesas. Bromeamos con el tema del turismo, decimos que es prioridad nacional y no lo es en los hechos. El sector ocupa el último lugar en el presupuesto federal, pues tiene asignado el 0.04 por ciento, que es nada comparado con lo que aporta.
–En México las políticas turísticas sólo se han abocado a los destinos de playa –se le comentó.
–Así es; se han marginado las zonas arqueológicas. Ocupamos el decimoquinto lugar del mundo en que el turista gasta menos, y somos el séptimo lugar más visitado, no hay correspondencia.
–¿La ley de turismo es nula?
–No sirve, está caduca.
–Hasta ahora Fonatur, ¿se ha movido en la opacidad?
–Se ha justificado señalando que hay que vender, que hay que enajenar el patrimonio de Fonatur.