■ No condena la resolución el operativo del ejército de Bogotá en territorio ecuatoriano
La OEA “rechaza la incursión” de fuerzas colombianas en Ecuador
■ Mención al “compromiso” de combatir a los grupos criminales vinculados al narcotráfico
■ “Justificable”, el ataque en el que fue abatido Raúl Reyes, señala John D. Negroponte
Ampliar la imagen El subsecretario de Estado estadunidense, John D. Negroponte; la ministra de Relaciones Exteriores de Ecuador, María Isabel Salvador, y el canciller de Colombia, Fernando Araújo, durante la sesión de la Organización de Estados Americanos en la que se discutió una resolución respecto de la crisis andina, luego del ataque del ejército colombiano a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano Foto: Reuters
Washington, martes 18 de marzo. La Organización de Estados Americanos (OEA) adoptó este martes una resolución que dejó de lado la condena a la agresión perpetrada por las fuerzas militares y policiales colombianas en territorio de Ecuador, el primero de marzo pasado, y se limitó a “rechazar la incursión” efectuada sin el consentimiento del gobierno ecuatoriano.
Los cancilleres de diez países miembros –entre los que no estuvo la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa– y 24 embajadores ante el organismo, discutieron hoy durante 14 horas un acuerdo de resolución que establece las bases para el restablecimiento pleno de las relaciones entre Ecuador y Colombia, rotas el 2 de marzo pasado tras el ataque colombiano en la provincia ecuatoriana de Sucumbíos, en la que fue abatido el comandante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Raúl Reyes.
El documento fue dado a conocer a la una de la mañana, tiempo de Washington, en la sede de la OEA, al concluir una jornada que dividió a los países miembros en dos bandos. Por un lado, los que apoyaron la propuesta de “condenar” la agresión colombiana y, por el otro, los que alineados con Colombia y Estados Unidos consideraron “justificable” la acción “preventiva” contra una “organización terrorista”.
Una salida de consenso
A estas dos posiciones se sumó durante el lunes una tercera iniciativa proveniente de la misión canadiense que promovió una salida de consenso, que al parecer fue la que finalmente se impuso, con una mención al “compromiso” de los estados miembros de combatir a “grupos criminales”, en particular “a aquellos vinculados al narcotráfico”.
Los diplomáticos fueron convocados este lunes para analizar el informe de 12 páginas de una misión de la OEA enviada del 9 al 11 de marzo a Ecuador y Colombia, cuyo objetivo fue recoger información de primera mano sobre el bombardeo aéreo y la incursión terrestre colombiana en la que murieron 23 personas, incluido Raúl Reyes, uno de los siete miembros de la dirección colectiva de las FARC.
Sin embargo, la resolución apenas “toma nota” del informe y no incluyó ninguna de las recomendaciones que hizo la misión encabezada por el secretario general, Miguel Insulza.
En el orden del día también estaba previsto discutir la resolución con la que se trataría de cerrar el conflicto entre Quito y Bogotá, pero además del enfrentamiento de las dos posiciones surgió otro motivo de discusión relacionado con la publicación de una fotografía que trató de vincular al ministro de Seguridad Interna y Externa de Ecuador, Gustavo Larrea, con las FARC.
“Mientras esta campaña (informativa) se mantenga no habrá reapertura de relaciones”, dijo Larrea en la capital ecuatoriana.
De acuerdo con una lista oficial, en la reunión de la OEA participaron los cancilleres de Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Haití, Jamaica, Nicaragua, Panamá, Uruguay y Venezuela, y el subsecretario de Estado de Estados Unidos, John D. Negroponte, quien dijo a la agencia Dpa que fue “justificable” la incursión colombiana dos kilómetros dentro del territorio ecuatoriano.
Ecuador buscó que el texto de la OEA emitiera una “condena”, pero después, al parecer, aceptó el término “rechazo” a la violación de su territorio, con el apoyo de los demás países sudamericanos, que consideran necesario que el tema de la guerrilla colombiana y su entrada en territorios vecinos debe ser atendida por el organismo en sesiones próximas.
El canciller colombiano Fernando Araújo dijo que su país se negó durante el día a hablar de “rechazo” en la resolución, porque “eso ya es pasado”. En cambio, con apoyo de Negroponte, intentó incluir en la resolución una referencia a la “obligación” de los estados de combatir a grupos criminales y trasnacionales.
Algunos diplomáticos dijeron estar de acuerdo con Colombia en que el “rechazo” ya quedó claramente establecido en la declaración del Consejo Permanente de la OEA del 5 de marzo, y en la del Grupo de Río del 7 de marzo, razón por la cual no era necesario repetirlo en el texto de la OEA.
Venezuela trató durante la jornada mantener un tono conciliador, pero también destacó la importancia de respaldar las decisiones del Grupo del Río, de las cuales no participó Washington. El canciller Nicolás Maduro señaló que el retraso en la negociación se debió a la injerencia de Estados Unidos.
La delegación colombiana dijo estar dispuesta a aceptar una mención a la inviolabilidad territorial, siempre que se incluya la referencia a los compromisos de las naciones para luchar contra el terrorismo, lo que Ecuador ha rechazado en días recientes porque implica involucrar a este país en la guerra interna colombiana y en el Plan Colombia financiado por Estados Unidos.
Este lunes, en Ecuador, el ministro de Defensa, Wellington Sandoval, realizó un recorrido por la frontera con Colombia para mostrar a periodistas que esa región tiene una escasa presencia de las autoridades militares y policiales colombianas y que de hecho, en la mayor parte de los 720 kilómetros que mide la línea limítrofe hay presencia de guerrilleros de las FARC y del Ejército de Liberación Nacional, la segunda fuerza insurgente colombiana.
Colombia sólo mantiene dos destacamentos militares frente a 14 de Ecuador, dijo Sandoval, quien afirmó que los guerrilleros pasean libremente por la zona fronteriza, porque el ejército de Colombia no toma posiciones, pese a sus incursiones.
Sandoval informó que en noviembre pasado el ejército de Ecuador estuvo a punto de capturar al comandante de las FARC, Raúl Reyes, y que de ello fueron enteradas las autoridades colombianas, sin que hubiese reacción alguna.
“¿Por qué esperaron a que pasara a Ecuador para atacarle? ¿Trataban de involucrarnos?... Lamentablemente desde hace algún tiempo hay un plan malévolo para involucrar a Ecuador en el Plan Colombia... en una guerra que no es nuestra”.