■ Conquista la izquierda 30 ciudades, incluida Toulouse, con 40 años de gobiernos derechistas
Ganan socialistas comicios municipales en Francia; revés para Nicolas Sarkozy
■ La derecha conserva Marsella
■ Advierte Fillon sobre la “instrumentalización” de los resultados
Ampliar la imagen Simpatizantes del Partido Socialista celebran la victoria electoral en Toulouse, considerada “feudo” de la derecha que se mantuvo en el poder 40 años. En los comicios de ayer, la izquierda alcanzó importantes triunfos al adjudicarse también Estrasburgo Foto: Reuters
París, 16 de marzo. La derecha del presidente francés Nicolas Sarkozy fue derrotada hoy en la segunda vuelta de las elecciones municipales ante el Partido Socialista (PS), que le arrebató algunos de sus feudos como Estrasburgo y Toulouse, en lo que se considera un “voto de castigo” al jefe de Estado, diez meses después de su elección, aunque la derecha pudo conservar Marsella.
De esta manera, la izquierda obtuvo en estos comicios 49.5 por ciento de votos frente a 47.5 por ciento de la derecha. La jornada electoral registró una abstención de 34.5 por ciento.
El Partido Socialista (PS) y sus aliados recuperaron Estrasburgo, Saint-Etienne, Evreux, Quimper, La Seyne-sur-Mer y Roanne, después de haberlas perdido en las elecciones de 2001. Asimismo, tras 40 años en poder de la derecha, Toulouse, fue ganada por la izquierda.
Tras un gran suspenso, en Marsella, la segunda ciudad en importancia en Francia, el derechista, Jean-Claude Gaudin obtuvo el triunfo.
El socialista Bertrand Delanoe consiguió la relección de la alcaldía de París con una cómoda ventaja frente a su rival Francoise de Panafieu, de la Unión por un Movimiento Popular, de Sarkozy.
El viernes, Delanoe aseguró que su intención es agotar el segundo mandato, hasta finales de 2014. Asimismo, está considerado como una de las figuras favoritas para encabezar la lista de candidatos a las presidenciales de 2012.
El secretario del PS, Francois Hollande, se manifestó satisfecho porque su partido “consiguió el objetivo de conquistar 30 ciudades de más de 20 mil habitantes. El presidente dijo que entendería el mensaje de los franceses y vamos a decirle que los ciudadanos no estamos contentos con su gestión. Lo demuestran las urnas”, indicó.
Hasta el cierre de esta edición, Sarkozy no emitió declaración sobre los comicios.
Pero el primer ministro, Francois Fillon, advirtió contra una “instrumentalización” de los resultados, y en este sentido mencionó la baja participación y la importancia de cuestiones regionales a la hora de definir el voto.
Además, Fillon anunció que se intensificarán las reformas. “No es constructivo sacar enseñanzas a nivel nacional de este proceso”, y señaló que el gobierno presentará dos leyes para dinamizar la economía y el mercado laboral.
El peso de esta derrota recae, por encima de todo, en los hombros de Sarkozy, diez meses después de su victoria en las presidenciales, debilitándolo aún más, tras una continua caída de popularidad.
Sarkozy, que ya anticipaba una derrota, insistió en el carácter local de los comicios y dijo no tener la intención de modificar los objetivos de su política.
Paradójicamente, para el Partido Socialista la victoria podría avivar las luchas internas en un momento de debilidad de su dirección después de su derrota en las presidenciales, la tercera consecutiva. Desde mayo se han acentuado las rivalidades entre los dirigentes del PS, en particular durante la campaña por las municipales y de cara al congreso del partido, previsto para finales de este año, según algunos analistas.