Reprochan a Cofepris falta de control de la seudoefedrina
Diputados cuestionaron que en lugar de imponer controles más estrictos para la entrada al país de sustancias como la seudoefedrina, se opte por sacarlas de las fórmulas de las medicinas a fin de paliar el problema.
Durante la comparecencia de Juan Antonio García Villa, titular de la Comisión de Riesgos Sanitarios (Cofepris), el legislador perredista Fernando Mayans Canabal dijo que es preocupante que la Secretaría de Salud (Ssa) no tenga control más estricto en la importación de sustancias como la seudoefredina.
Cabe recordar que hace algunos meses, la facilidad con que entraban al país dichos productos quedó en evidencia cuando se conocieron los negocios del empresario de origen chino Zhenli Ye Gon.
Mayans Canabal expuso: “usted menciona que estuvieron ingresando a México cantidades innecesarias de seudofredina. Si no correspondían a las necesidades epidemiológicas, ¿quién dio esas autorizaciones? ¿O hay que llamar al doctor Julio Frenk (ex secretario de Salud) para que expliqué por qué ingresó esa cantidad al país con la venia de la Ssa?”.
El legislador dijo que preocupa que la dependencia no tenga capacidad para controlar una sustancia como la referida, la cual, además de ser ingrediente de antigripales, se utiliza para elaborar drogas sintéticas, y criticó que en lugar de mejorar la vigilancia se opte por quitarla de las fórmulas de algunos medicamentos. “Ojalá no suceda con el Propofol, que es un anestésico, o nos vayan a quitar la morfina”, apuntó.
Ante los reclamos, García Villa expuso que si la autoridad sanitaria hubiera tenido la facultad de llevar a cabo un control estricto de las importaciones, y que los antigripales hubieran sido clasificados en la fracción II, grupo 2, de la Ley General de Salud, “seguramente se hubieran dado a la autoridad los instrumentos para poder garantizar un control adecuado”.
Por otra parte, la diputada priísta Lorena Martínez Rodríguez reclamó la tardanza de la Cofepris en otorgar registros sanitarios a los medicamentos, que llegan a tardar hasta dos años, dijo.