■ Mínima presencia en Yucatán y Campeche por pugnas internas
Los chuchos volverán al poder en QR, único bastión del PRD en la península
El Partido de la Revolución Democrática (PRD), que renovará sus dirigencias nacional y estatales el domingo, apenas sobrevive en Yucatán y Campeche, sobre todo por pugnas internas.
El panorama es menos sombrío en Quintana Roo, donde recientemente derrotó por estrecho margen al Partido Revolucionario Institucional en la elección de alcalde de Benito Juárez (Cancún).
El sol azteca está acéfalo en Quintana Roo desde finales de 2007, cuando la dirigencia nacional destituyó a Juan Ignacio El Chacho García Zalvidea por oponerse a la candidatura de Gregorio Sánchez Martínez a la alcaldía de Cancún. Desde entonces la dirigencia estatal está en manos del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y no se descarta que Nueva Izquierda, la corriente hegemónica en el estado, recupere el poder este domingo.
En Yucatán, el perredismo definirá su futuro al elegir al sustituto de la delegada Marcela Nolasco, a quien las distintas tribus acusan de incumplir su labor y desviar fondos.
En Campeche, el PRD ha estado encabezado durante 16 años por seguidores del ex diputado federal Abraham Bagdadi Estrella, identificado con Nueva Izquierda. Esta vez la disputa será entre Ismael Canul (del grupo bagdadista), Rafael Quijano, Aureliano Ocampo y Ana Mijangos, esta última favorecida en las encuestas internas.
Los perredistas de Cancún han concentrado la dirigencia de Quintana Roo desde mediados de la década de 1990, desplazando a militantes de Chetumal, la capital del estado, que enfrentan infructuosamente a los grupos dominantes, entre los que destaca la familia de Salvador Ramos Bustamante, ex líder estatal de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), quien fue adversario del gobernador Mario Villanueva en el PRI y representa a Nueva Izquierda.
El predominio de Cancún se debe a que ese polo turístico concentra 25 mil 460 militantes, de un total de 46 mil 383 en todo Quintana Roo. En cambio, en el municipio sureño de Othón P. Blanco (cuya cabecera es Chetumal), hay sólo 7 mil 421 militantes.
La ventaja de Cancún sobre Chetumal será abrumadora, ya que en esa ciudad del norte del estado se colocarán 17 casillas, contra cinco en la zona sur.
Los perredistas de Cancún apoyan a Nueva Izquierda, cuyo candidato es el ex diputado local Jaime Hernández Zaragoza, alcalde suplente. Otro aspirante respaldado por Nueva Izquierda es Rafael Quintanar González, yerno de Salvador Ramos.
En Chetumal hay un candidato apoyado por Izquierda Democrática Nacional: Hugo González Reyes, quien tiene pocas posibilidades de triunfo.
En contraste, el sol azteca casi desapareció de Yucatán en la elección de gobernador, en 2007. Apenas pudo conservar su registro, con 2 por ciento de la votación.
Para la contienda en Yucatán hay seis aspirantes: Alejandro Cuevas Mena, ex diputado estatal, identificado con el ex dirigente Eduardo Sobrino; Juan Carlos Pérez Cervera, vinculado a Izquierda Democrática Nacional; Antonio Figueroa Jiménez, incondicional de Sobrino Sierra; Russel Arjona, cercano a Izquierda Social; Pedro Barrera, de los Cívicos, y David Barrera Zavala, de Nueva Izquierda. Todos, con excepción de David Barrera, han estado vinculados con Andrés Manuel López Obrador.