■ Termina el silencio; en Tabasco ofrecerá su postura sobre energía
Calderón aboga de nuevo por las reformas estructurales
■ En gira de trabajo recibe elogios de Manuel Oliva y Ney González
Acaponeta, Nay., 13 de marzo. El presidente Felipe Calderón volvió a abogar por la aprobación de las reformas estructurales, a cinco días de celebrar el aniversario de la expropiación petrolera en Tabasco.
En esta gira, el michoacano recibió reiteradas loas de sus anftiriones. Mientras el gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, declaró ser su “soldado”, el nayarita Ney González agradeció el padrinazgo del jefe del Ejecutivo con la debida aclaración: “no le estoy haciendo la barba al Presidente”.
En el contexto del debate sobre la privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex), Calderón afirmó que la inversión en beneficio de los mexicanos aumentará “más y más rápido” en la medida en que se aprueben las reformas estructurales.
Renuente a ofrecer su postura sobre el tema energético en semanas recientes, el mandatario federal lo hará en la tierra de su ex contrincante, el perredista Andrés Manuel López Obrador, de acuerdo con información de la Presidencia de la República.
En San Luis de la Paz, Guanajuato, el primero de los cuatro puntos que visitó, puso en marcha un programa de apoyo para que las empresas se instalen en zonas marginadas de México, similares a algunas de África, Asia y América Latina.
Al visitar la maquiladora de ropa Dasan, propiedad del coreano Hee Chul Jung, aprovechó para encargarle “que trate bien a los jóvenes… que las condiciones de trabajo sean verdaderamente humanas”. Frente a los invitados estaban decenas de obreras que trabajan en la confección de prendas que se exportan a Estados Unidos.
Calderón manifestó que en vez de que las empresas se sigan yendo a China, India o Centroamérica, el gobierno federal las apoyará para que se establezcan en zonas pobres. A cambio pagará durante año y medio las cuotas de los institutos Mexicano del Seguro Social y del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, además de que la Secretaría de Economía destinará 250 millones de pesos para financiar la instalación de naves industriales, entre otras medidas.
En Tepic, donde inauguró la estancia infantil número 6 mil, aseguró que su gobierno trabaja para cambiar la realidad de marginación y discriminación que, “no le demos vueltas, sí sufren las mujeres en México”.
Tanto en Guanajuato como en Nayarit, Calderón fue recibido con palabras de halago por los gobernadores.
El panista Oliva se declaró dispuesto a sumarse a su gobierno como un “soldado” y “trabajar de la mano con un Presidente que no le tiemblan las piernas a la hora de tomar firmemente las riendas que demanda el desarrollo exitoso de nuestro México”.
Y en Tepic el priísta Ney González fue más lejos al señalar: “Jesucristo pidió, para llevar la cruz, que le ayudara un campesino, todos ocupamos en la vida a alguien que nos eche la mano. Yo tuve la buena suerte que me tocara ser gobernador con un Presidente que quiere mucho a Nayarit y a los nayaritas, con Felipe Calderón”.
Agradeció “todo lo que has apadrinado nuestros proyectos; la gente de Nayarit lo sabe, saben que no le estoy haciendo la barba al Presidente, saben que lo digo diario, esté el Presidente o no esté”.
Al final del recorrido, en la inauguración de un tramo carretero que ha suscitado críticas, porque no es de cuatro sino de dos carriles, el gobernador se alegró de que Nayarit ya no será “ni el cabús ni el patito feo de la nación”, gracias a “un amigo (Calderón) que sí refleja su amistad en el presupuesto”.