Enoja a promotores musicales chinos actitud de Björk
Pekín. El arrebato pro Tibet de la cantante islandesa Björk en un concierto en Shanghai no sólo ha molestado a los recelosos guardianes de la cultura en China, sino que ha enojado también a los promotores musicales, quienes dicen que la política es mala para el negocio y peor para los aficionados chinos. El ministerio chino de Cultura dijo la semana pasada que reforzaría los controles sobre los cantantes extranjeros y otros artistas después de que Björk coreó “¡Tibet! ¡Tibet!” tras su canción Declare Independence. El Ministerio de Cultura dijo que “hirió los sentimientos del pueblo chino”. Los promotores dijeron: “Es una pena que haya ocurrido esto. Sé que los artistas tienen que defender sus creencias, pero no puede esperar que hiciera ningún bien con su actitud”.