Usted está aquí: miércoles 12 de marzo de 2008 Opinión Isocronías

Isocronías

Ricardo Yáñez

■ Bahía de Navachiste

Hasta no ver no creer, pero mientras, ¿por qué no ir leyendo y en las lecturas ver lo que se alcanza a ver no por creencia de quien lee sino por fe de quienes escriben, hablan, se dejan hablar a través de lo que vieron, de lo que vivieron, de lo vivido que pervive?

La eternidad, por lo que se ve, comienza un lunes, el próximo, en Navachiste, “rincón de agua y de arena, de atardeceres dispersos, de piedras rocosas y montañas incipientes (...) Navachiste es un sitio discreto con un mar de manantiales subterráneos en cuyo fondo” los sueños, leo en Ernestina Yépiz, piden ser rescatados. “Siempre en Semana Santa” es la consigna de este encuentro artístico, sobre todo poético, pero no nada más, sobre todo de jóvenes, pero no nada más, que también los más adultos y los tan jóvenes que ni a jóvenes llegan, los niños (“¿pero se puede ser tan joven?”: Lennon), cuentan y llegan a contar en imágenes retazos de su vivir, cuento que necesariamente vivirán, se nos platica (leemos), lo suficiente como para necesitar alguna vez nuevamente contarlo.

Todos los días el mismo entusiasmado día, sugiere Mario Bodart, recordando algún verso juanramoniano, y, citando o reconociendo, o ambas cosas, profiere: “Sólo muerto estaré más lejos de la muerte./ Uno se convierte en ninguno”.

En el Carrizo Colorado, ha escrito Fernando García Alvarex, “por la marisma se pasean, discuten, trabajan y se hermanan lo mismo pintores, escultores, poetas, músicos, bailarines, actores y fotógrafos que trovadores, performanceros, danzantes y escritores de todo el mundo (...) Una semana en el paraíso”. Allí donde (Dolores Castro) “las montañas parece que están saliendo del mismo mar (…) se lleva a cabo una convivencia milagrosa de distintas clases sociales, diferentes edades y hasta culturas diversas”.

Agustín Velázquez Soto: “La bahía de Navachiste tiene en su extensión numerosas islas y entradas de agua que hacen que el paseante viva la sensación de encontrarse en otra dimensión”. Ya hablaremos de las instituciones, organizaciones y particulares que auspician este tan inusitado como arraigado festival de las artes.

Convoca la Fundación Cultural Navachiste, o sea Antonio Coronado, Celia Cortés y un eficiente grupo de –por lo que a vuelo de pájaro se ve– buenos amigos.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.